"Después que defienda mi título, quiero volver a la La Habana'', afirma campeón cubano

 Rancés Barthelemy durante una conferencia de prensa.  Foto: Roberto Koltun.

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Por Jorge Ebro.

Cuando se apague el último eco de la pelea, Rancés Barthelemy (24-0, 13 KO) viajará a Washington con el objetivo de encontrar una respuesta definitiva a un plan esperado durante largos ocho años: regresar a Cuba.

Barthelemy, quien defiende este viernes en el Hard Rock Live de Hollywood su faja de las 135 libras frente a Mickey Bey (22-1-1, 10 KO), no ha visto a sus padres desde que siendo un adolescente se montó en una embarcación junto a sus hermanos en busca de nuevos horizontes y sueños.




Uno de ellos lo ha cumplido doblemente, pues conquistó fajas en las divisiones súper pluma y ligera, algo que será apreciado -de hecho ya lo es- por esa gente a la que un día le dijo adiós de manera temporal, sin saber cuándo ni cómo iba a volver.

Por el momento, es hora de pelear. Ya habrá tiempo para los abrazos.

Dicen que te van a noquear en el quinto asalto…

"Eso es una gran mentira de Floyd Mayweather padre, porque él sabe que Mickey Bey nunca ha tenido manos. Todo el mundo sabe cómo obtuvo su título [ante Miguel Vázquez], que fue un regalo de su hijo. Si Floyd me hace esa clase de regalos, ya hubiera sido campeón en 10 divisiones''.

Tal parece que Mayweather padre tiene más deseos de pelear que Bey.

"Si lo miras bien, te das cuenta que se le sienten los nervios a Bey, él está consciente de que tiene un problema grande este viernes, un libro de matemáticas enfrente de él. El sabe lo que le espera''.

¿Qué le espera?

"Imagínate, cuando yo mismo me veo en los videos me doy cuenta que soy un problema para cualquiera. Peleo de zurda que de derecha y formo allá arriba un arroz con mango. En estos días Bey no ha dormido. Lo que va para encima de él es candela''.

¿Esta es tu última pelea en 135 libras?

"Sí, y por eso quiero irme de la división en grande, me voy a las 140 donde me siento mejor, más fuerte. Ya en ese peso le gané a Antonio DeMarco. Tengo las herramientas para vencer en ese nuevo territorio de libras''.




Dice tu manager, Luisito de Cubas, que puedes ganarle a muchos en 147.

"Bueno, bueno, mejor no apurarnos. Por ahora Bey, luego veremos, aunque si él lo dice…''.

Y de aquí te vas a La Habana.

"Sí, ya estoy en los trámites. Primero voy corriendo a la embajada cubana en Washington para ver si me dan la entrada o no. Siento mucha añoranza por mi tierra. Llevo ocho años fuera de Cuba sin ver a mis padres, a mis primos que son hombres. De hablar de eso se me aprieta el pecho''.

Saliste siendo un adolescente, desconocido, ¿regresarás con dos títulos mundiales?

"Eso es seguro. En mi barrio de Arroyo Naranjo están locos porque acabe de llegar. Mis logros también son de mi gente. Mis hermanos del barrio crecieron conmigo entre muchas carencias, por eso quiero compartir con ellos mis éxitos''.

Y ahora vas a ser padre por segunda vez.

"Doble campeón mundial y papá por segunda vez. Otra hembra. Así que voy a luchar doblemente por ellas. A mis hembras no le pueden faltar los frijoles''.

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