Kendry Morales fue el Latino de la Semana pero por mucho

En 27 turnos, Kendrys Morales disparó 17 imparables, para un promedio de .630, con ocho carreras anotadas y 12 impulsadas

Por Jorge Morejón.

Kendrys Morales es el mejor pelotero salido de Cuba hacia las Grandes Ligas en los últimos años, superior incluso a Yoenis Céspedes o José Abreu, aunque la fortuna muchas veces haya insistido en darle la espalda.

Estrella con el bate e incluso desde el montículo en las categorías juveniles, ha tenido un camino más difícil para su ascenso y establecimiento en las Mayores, obligándolo a un esfuerzo casi sobrehumano para sobreponerse a la mala suerte.

Morales había tenido una mitad de campaña decepcionante, bien alejada de los números que en el 2015 lo llevaron a disputarle el premio Retorno del Año 2015 en la Liga Americana a Prince Fielder quien finalmente lo ganó.

Su average estaba por debajo de su peso corporal, apenas había sacado ocho pelotas sobre las cercas y su cantidad de impulsadas lo colocaba bien lejos de las 100, según proyecciones de expertos.

Pero de pronto el cubano comenzó a ver la pelota del tamaño de una calabaza y a pegarle en el mismo centro con una brutalidad suprema.

Pocas veces fue tan fácil escoger al latino de la semana como ahora, cuando Morales estuvo indetenible entre el domingo 26 de junio y el sábado 2 de julio.

En 27 turnos, el León de La Habana disparó 17 imparables, para un promedio de .630, con ocho carreras anotadas y 12 impulsadas.

Más de la mitad de sus hits fueron extrabases: tres dobletes y seis cuadrangulares, para un promedio de slugging de 1.407.

Fue tal el despertar ofensivo de Morales, que el manager Ned Yost prefirió arriesgar a la defensa y colocarlo en el jardín derecho, con tal de no perder su bate incendiario.

Pero el cubano no sólo respondió con el madero, sino que se le vio seguro en la pradera derecha, cubriendo terreno abundante y realizando buenas jugadas con el guante.

Morales lleva ocho partidos seguidos con al menos un cohete y desde que entró en esa racha, su average ha subido desde .222 a .267, en tanto llegó a 14 bambinazos y 45 impulsadas, cambiando su proyección a unas posibles 100 remolcadas.

Sólo con una actuación así pudo superar al venezolano Víctor Martínez, de losTigres de Detroit, inmenso en la caja de bateo.

El bateador designado de los Tigres despachó diez cohetes en 26 turnos, para average de .385, con siete anotadas y 11 empujadas.

Como extrabases conectó cuatro cuadrangulares, para slugging de .846.

Su compatriota José Altuve, de los Astros de Houston, sigue encendido con el madero y ya se adueñó del average más alto de todas las Grandes Ligas (.355), luego de disparar 11 hits en 25 oportunidades (.440).

Altuve anotó ocho carreras y remolcó cinco. Entre sus imparables sumó un doble, un triple y un vuelacercas, para slugging de .680.

Enorme semana tuvo también el dominicano Manny Machado, de los Orioles de Baltimore, al ligar 12 cohetes en 27 veces, para average de .444, con seis anotadas y siete impulsadas.

Sus únicos extrabases fueron dos biangulares, para un promedio de slugging de .518.

Y el veterano Albert Pujols, de los Angelinos de Los Ángeles, tuvo destellos de su gloriosa carrera que terminará en el Salón de la Fama de Cooperstown.

Pujols bateó de 24-11 (.458), con tres anotadas y siete remolcadas, tres dobletes, un bambinazo y slugging de .708.

Frío, frío

El venezolano Eduardo Escobar, de los Mellizos de Minnesota, se enfrió en los últimos siete días, al conseguir apenas un hit en 15 turnos, para average de .067, con cuatro abanicados.

Su compañero de equipo, el dominicano Danny Santana, tampoco estuvo efectivo con el bate, al irse de 12-1 (.083), con dos ponches.

Tomado de ESPNDeportes