Los Gourriel: Yulieski.

Por Daniel de Malas.

Los deportes tienen sus estrellas, sus súper atletas, los deportistas amados y los odiados de la afición. De una manera singular, quizás sin precedentes, Yulieski Gourriel, el segundo hijo del gran Lourdes, es una mezcla de todas esas categorías en el beisbol cubano.

Desde su mismo debut, en el año 2002, Yulieski ha sido un pelotero muy mediático, por su afinidad con la noticia. En esa temporada, donde tuvo un rendimiento extraordinario para un debutante (128 hits, 29 dobletes, 9 jonrones, 65 anotadas y 61 remolques, además de average de 308), coincidió con el más espectacular de los novatos que jamás hayan estado en las Series Nacionales, Kendry Morales, quien se llevó merecidamente el premio, tras imponer varios records. Aunque Yulieski no fue el Novato del Año, algunos seguidores de Kendry vieron al espirituano como un rival muy considerable, y comenzó parte del fenómeno.

Ese 2002 también fue protagonista de una Postemporada de ensueño para Sancti Spiritus y Holguín, con estos últimos llevándose el gato al agua, tras 7 disputados partidos. Yulieski, en ese primer playoff de su vida bateó, 348, remolcó 11 y despachó par de Mizunos. Su carrera comenzaba cumpliendo con las promesas pretemporada y el “Yuly” debutaba como una estrella. No obstante ese mismo primer año Yulieski recibió un abucheo en su propio estadio, que le sacó lágrimas al muchachón de 17 años y quizás fue el preámbulo de su vida en el beisbol cubano. 

Y es que los años pasaron y el público decidió dividirse, entre los que le siguen y con mucha razón le declaran el mejor pelotero de Cuba; y los que le odian y le culpan de cuanta desgracia puedan tener los Gallos y/o el equipo Cuba, donde ha lucido quizás no tan grande como en el patio, pero donde no ha sido realmente el culpable de las derrotas del conjunto grande.

Pero este trabajo no es para debatir cuan estelar es, o no, el antesalista en cuestión, sino para compartir con ustedes la suerte, que hace unos días tuve, de que Yulieski me diera una entrevista, donde de principio a fin no hubo ni “entre comillas”, ni correcciones.

FICHA TECNICA

Yulieski Gourriel Castillo.

Edad: 30 años

Batea y tira a la derecha.

Mide 1.84 metros y pesa 88 kilogramos.

12 Series Nacionales, 1144 partidos jugados, 1458 hits, 267 dobles, 242 jonrones, 975 impulsadas y average de 333.

Swing Completo: ¿Qué hace Yulieski Gourriel cuando está alejado de la pelota?

Yulieski: Eso no es posible, pero de todas formas te digo que soy muy hogareño, muy familiar, tranquilo, me encanta la televisión, los video juegos, el dominoes, ir a la playa.

S.C.: ¿Qué significa ser hijo de Lourdes?

Y: Muy difícil, cuando salí de los juveniles me veían como el hijo de papá y las expectativas eran muchas. Te digo que siendo novato ya se esperaba mucho de mí.

S.C.: ¿Cómo te sientes siendo uno de los tres Gourriel que ahora juegan?

Y: Es un sueño hecho realidad estar con mis hermanos en el terreno, un anhelo que se me dio y lo he disfrutado al máximo.

S.C.: ¿Qué es para ti ser miembro del equipo nacional?

Y: Lo más grande, crecí viendo a mi padre en el Cuba y fue uno de los que más duró. Estuvo 17 años en el equipo grande. Cuando lo integré por primera vez me sentí en las nubes y ya llevo 12 años, ojala pueda llegar a donde él llegó.

S.C.: ¿Cómo fue Lourdes como director?

Y: Muy exigente, muy difícil. Teníamos que esforzarnos al doble. Nunca tuvo mano suave con nosotros. Que él fuera el manager nos comprometía y buscábamos duplicar los entrenamientos, la disciplina. Así nos exigía y así tratamos nosotros de hacer.

S.C.: ¿Qué es el equipo Sancti Spiritus para ti?

Y: Mi formador. Mis primeros pasos desde los 7 años fueron en la provincia de Sancti Spiritus. Hay muchos entrenadores que son la razón de los resultados. Sin dudas te aseguro que le debo mucho a Santi Spiritus.

S.C.: ¿El momento más alegre de tu carrera?

Y: Ser Campeón Olímpico en el 2004, pues ese es el mayor anhelo de un atleta, aunque también me sentí muy feliz con el segundo lugar alcanzado en el primer Clásico Mundial del 2006, con los mejores peloteros del mundo reunidos allí.

S.C.: ¿Y el más triste?

Y: La Olimpiada de Sydney, 2008.

S.C.: ¿Qué crees de la tendencia actual de comparar y decir que los peloteros de antes eran mejor que los de ahora?

Y: esa es una comparación muy difícil, no sé cómo alguien se atreve a hacerla, pues es muy injusta como quiera que la mires.

Una cosa si está clara, antes se jugaba una pelota muy caliente, de excelente nivel, pero no podemos demeritar lo que tenemos hoy.

Antes no se trabaja tanto con las pesas, la preparación no era tan especializada y no existía la tecnología de hoy en día. Ponte a pensar, todo esto tiene que influir en que le rendimiento mejore.

S.C.: ¿Crees entonces que no hay crisis en el beisbol cubano?

Y: Ciertamente no estamos en un buen momento, pues otros países van en ascenso y nosotros nos hemos estancado. Ya se empezaron a dar pasos de avance, insertando jugadores en otras ligas. Necesitamos ver otra pelota, otra óptica del juego, para combatir las deficiencias que tenemos ahora.

S.C.: ¿Qué crees de la designación de Víctor Mesa como manager por 4 años?

Y: Me parece bien que el manager sea estable, no porque sea Víctor, sino porque el que este puede lograr continuidad, escoger a sus jugadores, sus tácticas, estrategias. Una sola temporada internacional no basta para que un director le saque al Cuba las lascas posibles. No sé si la formula exacta sean 4 años, 3 o 5, pero se debe buscar continuidad.

S.C.: ¿Crees que el lugar alcanzado en el Clásico de este año fue justo?

Y: Yo creo que podíamos más, tuvimos muy buena preparación, como no se hacía en muchos años y creo que se vio, sobre todo en la ofensiva, que había estado disminuida en torneos recientes.

Pero nos topamos con Holanda, que desde el 2000 nos vienen maltratando, nos jugaron bien y perdimos.

No creo que ganó Holanda, sino que nosotros podíamos haber jugado mejor y haber sido los que pasáramos.

S.C.: ¿Cuál crees que fue la causa del 0-5 en el reciente tope contra Estados Unidos?

Y: Hay varias, no estábamos bien preparados y otras que ya te mencioné. Para topar contra Estados Unidos, aunque sean universitarios, no se puede ir con un equipo inexperto. 

Nos encontramos 3 abridores con rectas entre 95 y 98 millas, dos cerradores con las mismas condiciones. En nuestra pelota no vemos eso nunca, nuestros pitchers ni se acercan a eso. En el terreno se vio que muchas veces no podíamos con la recta.

S.C.: La afición muchas veces la emprende contigo, ¿te sientes culpable de algo? O ¿sabes por qué esto ocurre?

Y: Yo me siento con la conciencia tranquila, pues en el terreno siempre he dado lo mejor de mí. De hecho nunca le he respondido a mis detractores. Si el público no me apoya no tengo porque tomar represalias.

Te digo otra cosa, gracias a mi familia y mis hermanos, quienes siempre me han ayudado con esto, he logrado sobreponerme. Pero te aseguro que es duro y no se lo deseo a nadie.

S.C.: ¿Qué hay en el futuro de Yulieski Gourriel?

Y: No te puedo decir, porque ni yo mismo se (se rie). Hay tantos proyectos. Lo único que le puedo asegurar a la afición es que siempre voy a dar los mejor de mí y que si el cuerpo me lo permite voy a jugar beisbol por muchos años más.

Dicho esto concluí una maravillosa tarde, en una casa donde el beisbol es una religión, que todos profesan, quieren y defienden, además del amor que les une.

Los Gourriel hoy, siguen siendo la familia de peloteros que siempre han sido, cosa que ni el mismo apocalipsis podrá cambiar.