Armando Capiro en el Marlins Park. |
Por Yasel
Porto
Se dice con
frecuencia que el béisbol es algo que abunda en Cuba si de aficionados,
jugadores, ligas y terrenos hablamos. Hay un refrán en el que se afirma que en
la mayor isla caribeña se da una “patada” y sale un buen pelotero. Eso es
cierto, pero igualmente es verídico que si hiciéramos la misma acción de dar un
golpe sobre la tierra insular, y será bien difícil que salga un ser capaz de
superar a ese hombre llamado Armando Capiró Lafferté.
No lo vi
jugar, o mejor dicho, no tuve el privilegio de verlo. Sin embargo, él es de
esos peloteros que con las historias que te hagan los demás, ya es suficiente
para imaginarte de algún modo a la perfección vestida de pelotero, y también,
de persona.
Con el
tiempo he oído los comentarios de muchas personas, que van desde gente cercana
como mi padre Moisés o amigos como William de Joungh y Jesús Suárez Valmaña,
hasta todo tipo de aficionados que no se cansan de elogiar las virtudes
inagotables del inmortal número 9 de la capital cubana.
No solo su
brazo inigualable, su elegancia admirable, una velocidad y tacto casi a la par
de un poder en sus muñecas que lo convirtieron por largo tiempo, en el mayor
slugger de la pelota cubana. Nadie fue más completo que Capiró en su etapa,
dicen miles de personas. Incluso hasta actuó como pitcher, y al menos en las
categorías inferiores fue capaz hasta de propinar no hit no runs.
Ha habido
muy pocos tan integrales como él desde que existe pelota en Cuba, dicen muchos
de esos miles, y por tanto, tantas personas no pueden estar equivocadas.
Sus records
y estadísticas dentro y fuera del país en esas décadas del 60 y 70, y hasta
1981 cuando la rodilla y un dirigente le frenaron su continuidad en el deporte
al máximo nivel, se combinaron con su clase, su figura, con su modestia y
sencillez, entre las tantas virtudes que dentro y fuera del terreno derrochó
alguien que pudiera encerrarse en: estelar hombre y pelotero.
Hoy Capiró
dispara otro jonrón, tal vez hasta mayor que cualquiera de los 162 que pegó en
Series Nacionales, o los 22 con los que implantó el admirable primado en 1973
con bate de madera, bola muerta y un pitcheo de mil quilates.
Y es que el
conocido “Toletero de Santiago de las Vegas” es uno de los 10 veteranos
de Industriales que viajaron desde La Habana hasta Estados Unidos para
participar en el evento que festeja en suelo norteamericano, los 50 años de
vida de los azules de la capital en las Series Nacionales.
Lo admirable
no está en eso, pues a fin de cuentas hay otros nueve iguales que él que se
trasladaron a la Florida. El detalle está en el hecho que será el único de
ellos que no podrá jugar, toda vez que Armando hoy se recupera de dos
enfermedades que lo han afectado últimamente.
Para muchos
pudiera ser un freno el hecho de estar afectado por una parálisis cerebral
parcial, y serias úlceras en su pierna izquierda, amén de su histórica
dificultad en la rodilla derecha. Para la mayoría de las actividades en el
comienzo de este evento, Capiró tuvo que andar en un sillón de ruedas.
Algunos mal
pensados, o que no conocen a este gran hombre, pudieran pensar que a todo el
mundo le gusta viajar, y nadie quisiera perderse un viaje al extranjero, tenga
el problema que tenga.
Los que
piensan de la otra manera, y los que saben quién es este hombre, no dudan ni un
instante que Armando Capiró participó de este evento por algo desligado por
completo de lo material.
Capiró vive
en Cuba sin grandes problemas, más allá de la salud. Su hijo Antúan, que reside
hace un tiempo en Miami, viaja con frecuencia a la isla y puede resolver
cualquier material que sea necesaria.
Las palabras
que Armando me dijo antes de entrar al estadio de los Marlins de Miami el
miércoles 21 fueron conmovedoras, y reafirmaron el pensamiento que tuve desde
el principio con respecto a lo impresionante que fue todo el tiempo la firmeza
de Capiró de acompañarnos en esta aventura, pese a sus dificultades.
Algunos de
nosotros dudamos en Cuba que él vendría. Pero no lo hizo, jamás flaqueó y hoy
ha contribuido enormemente a prestigiar este evento.
Hoy muchos
aquí hemos contribuido de algún modo a ayudarlo a seguir adelante en esta
travesía, pero él ha ayudado más a todos los que estamos alrededor de esto, al
evento mismo. Ha dado un ejemplo de voluntad de lucha, de empeño, de amor a la
vida, a los Industriales, al béisbol.
A
continuación expongo parte de mi conversación con él, que citaba anteriormente
minutos antes de entrar al Marlins Park, y durante el desafío que sostuvieron
los Peces con los Dodgers de Los Ángeles.
Como te has
sentido en estos días aquí en Estados Unidos?
“Muy bien,
la verdad. Yo sé que estoy mal de salud, pero ha sido muy bonito todo esto.
Hablar de nuevo con muchos compañeros míos cuando yo empezaba en la pelota, o
en general, ha sido algo especial. Igual que la gente que me ha llamado, los
que se me acercaron en el aeropuerto, en la calle, en todas partes para
saludarme. Eso ha sido muy bueno“.
Qué
peloteros ha s visto de tu tiempo?
“Varios.
Juan Antonio Pedroso, “Miñosito”, también Orlando Rubio que lanzó con
Industriales al principio. Remberto Reyes, que tiraba durísimo con Mazorra.
También Manolito Hurtado y Julio Rojo. En fin, unos cuantos más. Saludándome a
mí, a Chávez (Pedro), y a los que están en Cuba“.
Que sientes
al ser parte de este evento por los 50 años de Industriales?
“Imagínate.
Ese equipo para mí es muy grande. Yo le debo mucho a ese equipo. Y ser parte de
algo como esto donde se honre a Industriales para mí es una cosa muy importante
que me llena de felicidad“.
Considera
que los peloteros que han abandonado el país merecen ser parte también de los
Industriales?
“Claro que
sí. Ellos quisieron venir a Estados Unidos, o a otros países a jugar, a
probarse como jugadores. Esa fue su decisión y yo se la respeto. Yo quise
seguir en Cuba y no me arrepiento de ello. Creo que hay muchos peloteros que
hoy viven aquí en este país, que también hicieron mucho por Industriales y es
imposible sacarlo de su historia“.
Que cree de
este estadio en que estamos?
“Muy lindo
la verdad. Es algo bien atractivo estar aquí. Ver un juego del mejor béisbol
del mundo. Es algo especial para mí. Yo nunca había estado en un estadio de
Grandes Ligas, y dicen que éste es el más moderno. Lo que sí veo que está un
poco largo para dar jonrón. Yo creo que aquí no hubiera podido dar muchos
jonrones, sobre todo por el left y por el center field, porque está bastante
largo“.
Yo creo que
si los iba a dar, si otros con menos fuerza que tu lo dan ahora. Y te hubiera
gustado jugar aquí, y en general en las Grandes Ligas?
“Claro que
sí. Pero en mi tiempo, y todavía eso no está permitido, hasta que no se llegue
a un acuerdo entre las dos partes eso no se puede hacer de forma legal. Yo
quise medirme a ese nivel, pero no se podía hacer, y yo entonces solo pensaba
en jugar en Cuba, y que la gente tratara de salir contenta con lo que yo hacía,
y con lo que hacíamos nosotros“.
Si hubieras
jugado aquí, seguro hubieras sido tan estelar como en Cuba.
“Eso no lo
sé. Es difícil saberlo. Tal vez, pero creo que habían otros peloteros en Cuba
que también hubieran brillado hasta más que yo“.
Cuba siempre
ha sido un país que ha dado peloteros de tremendo nivel. En todas las épocas,
incluso la actual. Yo creo que la tradición beisbolera en nuestro país nunca se
va a perder.
“Yo pienso
igual. Antes que yo empezara había muchos jugadores estrellas, que jugaban profesional,
y luego vino la época de Chávez, de Isasi, Alarcón, Changa. Después la etapa
que yo jugué, con Muñoz, Marquetti, Medina, Wilfredo, Fernando, Anglada,
Vinent, Cheíto, y así vino después la época de Casanova, Linares, más Pacheco,
Kindelán, Víctor, Javier, Rogelio, Valle, De la Torre, El Duque, Lazo,
Contreras. Y hoy siguen habiendo muchas figuras, tanto los que han venido para
acá como los que hay en la Serie Nacional. Yo creo que esa tradición siempre va
a estar presente, y nuestra pelota va a seguir viva eternamente“.
Una de sus
virtudes también está la de seguir adelante. Las lesiones y las malas acciones
siempre las venciste con tu humildad y empeño de salir hacia adelante. Creo que
es una lección para muchos.
“Siempre he
tratado de olvidarme de las cosas malas. A mí me afectaron mi carrera, entre
las lesiones y el capricho de alguien que incidió en mi retiro antes de tiempo.
Yo a pesar de esas cosas lo que he hecho es dejarlo todo en manos del destino,
y seguir luchando en el terreno o en la vida. De mí se dijeron cosas feas, se
armaron historias. Hubo personas que no actuaron correctamente conmigo, pero mi
conciencia está tranquila y mi respuesta nunca será mala, pese a que me dolió y
todavía se siente algo porque yo quise haber dado todavía más cuando era
atleta. Yo lo único que he hecho en la vida es entregarme a mi gente, darlo
todo por el béisbol, por mi provincia, por el público capitalino y cubano. Eso
es lo que yo quisiera que cuente siempre, y no lo malo que me pasó al final.
Que me recuerden por lo bueno que pude hacer en el tiempo que físicamente pude destacarme
más“.
Por qué
Capiró a pesar de los problemas de salud que ya tenía desde Cuba ha participado
en este evento?
“Yo hice un
compromiso con ustedes y esa palabra que yo les di la tenía que cumplir. Por
eso yo he tratado aquí con mi hijo de ponerme mejor de salud, para poder
participar en estas actividades, y ya el día primero regreso a Cuba. Si el
juego fuera mañana regresaba a Cuba al día siguiente. Yo estoy aquí porque les
dije desde el principio que yo venía, porque era algo en honor a los Industriales,
y en honor a todos los que nos hemos entregado a ese equipo. No podía quedar
mal ni con ustedes, ni con la afición de aquí de los Industriales, ni con los
Industriales, pues para mí ese equipo significa lo que tú no te imaginas”.
Es suficiente.
No porque me lo haya dicho a mí, ni de la manera que lo hizo, yo, y todos los
que conocemos a este hombre, como los que no solo en Cuba, sino en ninguna
parte del mundo nacen con frecuencia, saben que Armando siempre hablará de
corazón, y que no necesita tocarse ese corazón, vivir plácidamente y alardear
de su pasión industrialista, para demostrar su extraordinaria clase.
Hoy Capiró
le ha enseñado a todos, que el amor y los sentimientos hacia Industriales,
hacia el béisbol y hacia la vida, lo tienen que demostrar con acciones y hechos
que solo los hombres como él, son capaces de hacer.
Gracias a él
porque Industriales ayer se hizo grande, y hoy se agiganta, porque entre tantos
golpes en el suelo cubano que vio el nacimiento de grandes peloteros, hubo uno
diferente que combinó la estelaridad beisbolera y humana, y ante los propios y
muchos golpes que hemos tenido en el evento, su ejemplo nos ayuda a todos a
seguir hasta el final.
Y es que
este moreno, hoy, con 65 años, y pese a una salud afectada de forma apreciable,
exhibe un espíritu y clase formidables que indiscutiblemente, vivirán en el
recuerdo de quienes lo admiraremos por siempre.
Porto, tu como siempre -y cuento desde el día que nos reunimos para crear el mvp cuba-, cuando lea un artículo tuyo malo, ese día creo que se acaba el mundo, gracias por mantenernos actualizados con este tema, y de capiro nada, tiene lo principal que debe tener un atleta, la modestia y el amor al uniforme.
ResponderBorrarMarcos
Lastima que se hayan hecho tantas cosas malas en la pelota cubana
ResponderBorrarNo solo Capiro, sino otros estelares como Pedro Jose, o mas recientemente Osmany Urrutia, fueron victima de injusticias de diferentes tipos y NUNCA ha habido una rectificacion publica, una disculpa o un pedido de perdon de parte de las autoridades
He tenido la suerte de ver jugar a Capiró unos cuantos años en la época de aquel trío que tuvieron los industriales con Marquetti, El y Medina. Cuando en una entrada venían ellos al bate creo que la probabilidad de hacer carreras era enorme y lo digo sin exagerar.
ResponderBorrarCapiró además de ser un tremendo bateador, destacaba por su potente brazo, cuando bateaban un jit al jardín izquierdo con hombre en segunda, no había dios que le doblara por tercera base. No cabe duda que ha sido uno de los peloteros extraclase que han pasado por nuestras Series Nacionales.
Desgraciadamente también hay que hablar de las cosas malas. Por todo lo que he estado leyendo sobre él, ha sido un hombre que ha pasado lo suyo a pesar de ser una gloria de nuestro beisbol y otro más en la lista de injusticias que se han cometido contra jugadores. Precisamente hay un jugador a quién la situación en que se encontraba Capiró en su momento lo acabó de determinar a abandonar el país. Así que solo desearle lo mejor del mundo a esta gloria y mucha salud, los que te vimos jugar y te admiramos no te olvidamos y solo espero que algún día entres al salón de la fama del beisbol cubano en todas las épocas. Un saludo
Armando Capiro uno de los mas grandes jugadores extra clase con su bate en ristre puso una moda al batear que despues fue copiada por muchos genuina y elegante señalamiento de por donde iba ha dar el homerum estirando su brazo en alto su mosquete era temido de los jardines al home ,que paso por nuestro beisboll debieran hacerle una estatua y quitar a alguien y ponerlo en las vallas gigantes, inaudita la injusticia a que fue sometido debieran nombrar al victimario aqui para que pague por su error y publicamente antes que sea tarde darle la gloria que merece este mortal y una disculpas a nivel nacional ,Si no fuera por lo sucedido muchos records le hubieran pertenecido de seguro le deseo salud y toda la gloria del mundo cabe tambien en el
ResponderBorraroscar fernandez mell, ese fue el h.p. que lo condeno al ostracismo deportivo
ResponderBorrarbuenas cuanto gusto me da ver a capiro. mi nombre es Rolando Diaz y fui el cargabates del equipo habana en el 68 el couch era Orlando salon. y es puesto de calga bates me lo consiguio mi gran amigo Urbano Gonzalez Basanta. me gustaria saber si capiro estara aqui en miami por siempre para viajar a verlo y recuerdo cuando fui al hospital a verlo cuando se partio su pierna. en fin tambien me gustaria si el puede ver esto que me llame y ya se recordara de mi tambien quisiera ver a marquetti .porque a julio Rojo lo he visto unas cuantas veces cuando he viajado a miami. dejenme saber por favor
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