Tomado de Zona de Strike.
El estelar segunda base de Santiago de Cuba Héctor Olivera Amaro aseguró que enfrentará la próxima temporada beisbolera “con todo”, luego de recuperarse de una trombosis en el brazo izquierdo, que lo mantuvo alejado de los terrenos por más de un año.
“Yo vengo con todo, vengo a jugar pelota; vengo a hacer lo mismo que hice siempre, tratar de dar lo mejor de mí”, dijo Olivera Amaro al término de un partido amistoso entre Avispas y Alazanes, desarrollado en el estadio Mártires de Barbados, de Bayamo.
“Mi plan es llegar al equipo Cuba de nuevo, tratar de tener buen rendimiento en la Serie Nacional y pienso que poco apoco –este es mi segundo juego de preparación- ir mejorando un poquito más… y nada llegar al equipo Cuba”, explicó el segunda base criollo al II Clásico Mundial (2009).
Olivera expresó que en esta campaña piensa abrir como regular en la formación santiaguera y que en lo que va de entrenamiento lo han ubicado como tercer o cuarto bate.
Respecto a la lesión el indómito manifestó que fue “un año y tres o cuatro meses tratándome la trombosis”, período en el que “traté de cumplir con todo lo que se me dijo”.
“Gracias a Dios estoy bien, mensualmente iba para La Habana a hacerme chequeos; durante la primera parte estuve ingresado en el CIMEQ (Centro de Investigaciones Medico Quirúrgicas), pero gracias también a todos los médicos de allí ya salí de ese bache y ahora estoy aquí entrenando y jugando pelota que es lo que me gusta”.
Héctor –de 28 años y nueve campañas- confesó que “siempre pensé con mente positiva, siempre pensé que iba a jugar” y que regresó al terreno bajo su responsabilidad.
“Los médicos me decían a los tres meses tú puedes, después así sucesivamente hasta que cumplí el año, ya en una reunión me pidieron que tomara una decisión y bajo mi responsabilidad decidí retornar”, apuntó.
Olivera afirma que hizo lo correcto y a pesar de que está a expensas de que pueda sufrir una recaída “estoy jugando pelota que es lo que quiero”, aunque hasta estos momentos todo marcha bien.
“Fui el mes pasado a La Habana para ver mí sistema de entrenamiento y no tengo problemas, todos los resultados han estado bien, no sé si tenga que volver antes de la Serie Nacional, porque me dijeron que debía chequearme cada tres mes, pero hasta hoy todo está bien, las pruebas están al cien por ciento, y pienso que no tengo ningún problema”, aseveró.
El destacado jugador –MVP del Mundial de 2011- reconoció “a todos los médicos del CIMEQ” la atención que le han dispensado, pues considera que “ellos son los principales responsables de que yo esté jugando pelota”.
También significó el apoyo de la familia –principalmente su madre y la esposa- y de los aficionados que se mantuvieron al tanto de su recuperación.
“Estuve un año sin hacer nada y tengo que agradecer al pueblo que me llamó a mi casa preguntando y pidiendo por mí (rezando), a todos los fanáticos decirles que voy a salir de nuevo y a darlo todo, voy a salir a jugar mi pelota que es lo que deseo… y van a ver a Héctor Olivera en la Serie Nacional”.
Finalmente asintió en que fue uno de los períodos más difíciles de su vida.
“Sí, fue un año bastante fuerte, venían eventos como el Clásico, que es lo más grande que tiene la pelota, y sin embargo no pude ir”.
“Fue durísimo porque al estar bien -terminé la temporada que todavía tenía 17 jonrones en tan pocos juegos- y que de momento desaparecer así es un golpe bastante duro que no es fácil, pero bueno la vida te pone a prueba y pienso que pasó y ahora a empezar de nuevo que es lo que quiero”, concluyó.
El estelar segunda base de Santiago de Cuba Héctor Olivera Amaro aseguró que enfrentará la próxima temporada beisbolera “con todo”, luego de recuperarse de una trombosis en el brazo izquierdo, que lo mantuvo alejado de los terrenos por más de un año.
“Yo vengo con todo, vengo a jugar pelota; vengo a hacer lo mismo que hice siempre, tratar de dar lo mejor de mí”, dijo Olivera Amaro al término de un partido amistoso entre Avispas y Alazanes, desarrollado en el estadio Mártires de Barbados, de Bayamo.
“Mi plan es llegar al equipo Cuba de nuevo, tratar de tener buen rendimiento en la Serie Nacional y pienso que poco apoco –este es mi segundo juego de preparación- ir mejorando un poquito más… y nada llegar al equipo Cuba”, explicó el segunda base criollo al II Clásico Mundial (2009).
Olivera expresó que en esta campaña piensa abrir como regular en la formación santiaguera y que en lo que va de entrenamiento lo han ubicado como tercer o cuarto bate.
Respecto a la lesión el indómito manifestó que fue “un año y tres o cuatro meses tratándome la trombosis”, período en el que “traté de cumplir con todo lo que se me dijo”.
“Gracias a Dios estoy bien, mensualmente iba para La Habana a hacerme chequeos; durante la primera parte estuve ingresado en el CIMEQ (Centro de Investigaciones Medico Quirúrgicas), pero gracias también a todos los médicos de allí ya salí de ese bache y ahora estoy aquí entrenando y jugando pelota que es lo que me gusta”.
Héctor –de 28 años y nueve campañas- confesó que “siempre pensé con mente positiva, siempre pensé que iba a jugar” y que regresó al terreno bajo su responsabilidad.
“Los médicos me decían a los tres meses tú puedes, después así sucesivamente hasta que cumplí el año, ya en una reunión me pidieron que tomara una decisión y bajo mi responsabilidad decidí retornar”, apuntó.
Olivera afirma que hizo lo correcto y a pesar de que está a expensas de que pueda sufrir una recaída “estoy jugando pelota que es lo que quiero”, aunque hasta estos momentos todo marcha bien.
“Fui el mes pasado a La Habana para ver mí sistema de entrenamiento y no tengo problemas, todos los resultados han estado bien, no sé si tenga que volver antes de la Serie Nacional, porque me dijeron que debía chequearme cada tres mes, pero hasta hoy todo está bien, las pruebas están al cien por ciento, y pienso que no tengo ningún problema”, aseveró.
El destacado jugador –MVP del Mundial de 2011- reconoció “a todos los médicos del CIMEQ” la atención que le han dispensado, pues considera que “ellos son los principales responsables de que yo esté jugando pelota”.
También significó el apoyo de la familia –principalmente su madre y la esposa- y de los aficionados que se mantuvieron al tanto de su recuperación.
“Estuve un año sin hacer nada y tengo que agradecer al pueblo que me llamó a mi casa preguntando y pidiendo por mí (rezando), a todos los fanáticos decirles que voy a salir de nuevo y a darlo todo, voy a salir a jugar mi pelota que es lo que deseo… y van a ver a Héctor Olivera en la Serie Nacional”.
Finalmente asintió en que fue uno de los períodos más difíciles de su vida.
“Sí, fue un año bastante fuerte, venían eventos como el Clásico, que es lo más grande que tiene la pelota, y sin embargo no pude ir”.
“Fue durísimo porque al estar bien -terminé la temporada que todavía tenía 17 jonrones en tan pocos juegos- y que de momento desaparecer así es un golpe bastante duro que no es fácil, pero bueno la vida te pone a prueba y pienso que pasó y ahora a empezar de nuevo que es lo que quiero”, concluyó.
Comentarios
Publicar un comentario
Formulario de comentarios