Serie del Caribe: Atreverse a pronosticar es de locos.

Mañana comienza la Serie del Caribe, con 5 equipos en la puja por el título, en uno de los torneos más respetados en la historia del beisbol profesional. No obstante, este año es distinto, pues en Margarita, Venezuela, Cuba se va a reencontrar con su pasado y este pequeño cambio (con una valor sentimental y competitivo de 54 abriles) hace que el concepto sea distinto, pues la Serie se ha rejuvenecido, se ha puesto coqueta y ahora el lauro tiene un extra de valor.

No es exceso de patriotismo o alarde de autosuficiencia, Cuba no dejó de participar en la Serie del Caribe por falta de calidad ni por supuestas sanciones, sino por el horrendo crimen de la eliminación del deporte profesional en la isla y el enclaustramiento de los atletas, condenados a competencias amateurs y a torneos nacionales. Cuba, no obstante, se fue del evento caribeño con aires de leyenda, pues era, en aquel entonces, el equipo a derrotar y el gran ganador de esos primeros torneos.

Lógicamente los conjuntos tradicionales, de Puerto Rico, Republica Dominicana, Venezuela y México, quieren dejar claro que se han repartido los campeonatos de la Serie del Caribe por puro merito y no porque Cuba se autoexcluyo. Este año 2014, es el indicado para demostrar que “fría se la toma cualquiera” o que “ya lo pasado, pasado”.

Con este incentivo superior y la realidad de un Villa Clara del que no tenemos currículo internacional, atreverme a pronosticar es de locos. Justamente, un vistazo genérico y una apuesta por los míos (sigo siendo industrialista, pero ahora más Naranja que yo, no lo hay) es la propuesta que les traigo.

A estas alturas aun quedan por definir algunos puestos determinados, en las formaciones de un par de equipos, así que por aquí, que es más corto.

Los Tigres de Licey tienen un plantel muy rápido en las bases y con un cuerpo de lanzadores, que quizás sea su mejor arma. José Offerman, su manager, aseguró que van por la corona, a la vez que son el conjunto con record de Series del Caribe ganadas, con 10, mientras que como país, también son los máximos acumuladores con 19 títulos. Ciertamente la historia es jugosa, pero Manny Acta (Gerente General) ha pasado trabajo localizando súper estrellas dominicanas y no lograron la formación que quieren, así que con los ajustes hechos, a strikes y piernas, tratarán de llevarse el gato al agua.

El otrora segunda base liga mayorista, Carlos Baerga, está al frente de los Indios de Mayagüez, con un reto grande, pues Puerto Rico no logra ganar una Serie del Caribe desde el 2000. Baerga cree en el descanso de sus abridores y en un cerrador de lujo como Saúl Rivera, que bien pudiera ser asistido en estas funciones por Tyler Herrón, que está previsto como set-up. Como complemento ofensivo Jordán Lennerton, Randy Ruiz y Kennys Vargas son las grandes esperanzas de los boricuas.

Los Navegantes de Magallanes (Venezuela) esperan por algunos nombres que le pueden convertir en el súper favorito, pero ya dieron a conocer su rotación de pitcheo y la verdad no asusta a nadie, con Daryl Thompson (posiblemente le abra a Cuba el domingo), Carlos Zambrano, Wilfredo Boscán y Tyson Brummett, con foja colectiva entre los cuatro de 6 ganados, 7 perdidos, 86 ponches en 139.2 innings y promedio de limpias de 4.38. Sin embargo, de llegar los refuerzos prometidos, la ofensiva será despiadada y el hecho de ser locales, siempre influye un tanto.

Los Naranjeros de Hermosillo, vienen con el compromiso de mantener el galardón de la Serie del Caribe en el país (México es Campeón reinante), pero los de Hermosillo llegan de ganar la temporada hace solo dos días y su staff de lanzadores está agotado, no tienen corredores rápidos como para generar problemas en las bases y entre los tres receptores no esperen muchos hits. La esperanza está en el trío de jardineros (todos son refuerzos) que deben asumir el protagonismo ofensivo.

El Villa Clara de Cuba, parece, sin dudas, la mejor maquinaria beisbolera, pero (Ojo que este es un “pero” muy importante) aunque a los cubanos se les considera profesional, pues no hacen otra cosa todo el año que jugar pelota, el porciento más grande de juegos (irrefutable enorme) lo efectúan contra sus propios compatriotas, así que los trucos del profesionalismo, no los tienen en su magnitud y aquello que su manager Ramón More dijo de “…los strikes son strikes y las bolas, bolas…” no es tan sencillo. El desafío es grande y hay mucho que demostrar.

Sigo creyendo que las fortalezas fundamentales de Villa Clara son los abridores y la receptoría, por lo que confió en que se cuelan en semifinales (clasifican 4 de los 5 equipos) y en ese partido, Freddy Asiel Alvares va a llevar a los suyos (los nuestros) a la Final.

De la Final, otro día les hablo, dejemos que los verdaderos actores de este espectáculo, se encarguen de los capítulos iniciales y después platicamos del desenlace.

Sin más por ahora,

Daniel de Malas Andreu.