Tomado de BaseballdeCuba.com, por Ray Otero
Antonio Jiménez Casa del Valle, más conocido como “Ñico” Jiménez, el gran center field de los elencos de Occidentales, Industriales y Habana en los inicios de nuestras Series Nacionales, oriundo de la capital de Cuba, La Habana, falleció este jueves a la edad de 73 años.
Jiménez se inició en la pelota organizada en 1956 con el elenco de La Cubanita en Güines, y en su primer torneo organizado bateó para .450 alternando entre el cuadro y los jardines.
Ya en 1957 entraría en la Liga de Quivicán, en donde conocería a futuros compañeros de Industriales en Series Nacionales, en los nombres de Pedro Chávez y Urbano González. En 1959 juega con el Casino Español en el campeonato de la Liga Atlética Amateur y pese a que su elenco terminó en la segunda posición, Ñico fue el líder de bateo con .408 e integró el elenco nacional de Cuba a los Juegos Panamericanos de Chicago, ese mismo año, en donde terminó bateando de 12-4 (.333), de un equipo que culminó en el cuarto lugar del torneo.
Jiménez llega a las Series Nacionales en 1961, participando antes en las Series Regionales con Industriales, pero finalmente formando el elenco Occidentales campeón de la primera Serie Nacional en 1962. El jardinero se titularía posteriomente en otras cinco ocasiones, con Industriales en 1963, 1964, 1966 y 1973, y con el Habana de Juan Gómez en 1968, para un total de 6 títulos en nuestros torneos.
Jiménez brilló mucho en la década del ’60 y principios de los ’70 de nuestra pelota, pero su facilidad para robar bases le dio gran popularidad en los jóvenes torneos cubanos, así mismo como su número 23 se convirtió también en un símbolo de velocidad en función de la ofensiva. En 1965 Jiménez logró su segundo título de robos, después del logrado en la II SN en 1963 (8), pero el de 1965 lo convirtió en recordista con 16.
Ñico Jiménez es considerado por muchos especialistas como el mejor center field de las primeras Nacionales. Pese a su discreta ofensiva en los torneos cubanos (.253), sabía suplir su bateo sobre todo por la calidad de su guante como gran fildeador y constituyó el mejor robador de bases en los inicios de nuestros torneos.
Precisamente en el departamento de robos, Jiménez fue líder del mismo en seis temporadas de las 13 en que participó de forma activa. Después de sus primeros dos títulos en robos en 1963 y 1965, repitiría en las temporadas de 1969 (VIII) con 49, y de 1971 a 1973 (X, XI y XII SN) con 43, 28 y 36, respectivamente, en 1971 y 1972 jugando por Habana y en las restantes por Industriales.
Todavía Ñico presenta el mejor promedio de robos en Series Nacionales por su balance de 297 robos en 397 intentos para un excelente 72% de efectividad. El pimentoso jugador también encabezó el departamento de manera histórica hasta que el matancero Wilfredo Sánchez se lo superó. El 3 de abril de 1969 Ñico igualó un récord individual de 5 robos en un juego ante Oriente, durante la VIII Serie Nacional.
Jiménez también lideraría otros departamentos ofensivos en sus temporadas como jugador activo, y entre ellos podemos mencionar sus cuatro lideratos en anotadas en 1965 (30), 1968 (72), 1969 (84) y 1971 (53) y el departamento de los triples en dos ocasiones, durante las temporadas de 1963 (5) y 1971 (6). En 1968, con sus 72 anotadas, impuso también un nuevo récord en Series Nacionales.
Su accionar en Cuba lo llevaría en varias ocasiones a integrar las nóminas de elencos nacionales. En total militó en 4 equipos Cuba, a los Panamericanos de 1959 en Chicago, EEUU; Centroamericanos de 1966 en San Juan, Puerto Rico; Panamericanos de 1967 en Winnipeg, Canadá y en los Panamericanos de 1971 en Cali, Colombia. En todos estos torneos conectó para .218 (55-12) con 6 robos en 11 intentos.
Llegue a toda la familia de Ñico Jiménez el más sentido pésame de toda la familia beisbolera cubana.
Elegante fildeador, excelente persona, mis condolencias.
ResponderBorrar