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| Yasiel Puig reconoce que puede dar mucho más |
Por Carlos A. Nava
SCOTTSDALE, Arizona -- Yasiel Puig ha sido irreverente; más por pasión que por descontrol.
El jardinero de Dodgers de Los Ángeles sabe de que su estilo en el terreno de juego es considerado controversial, aunque nunca asegura que nunca pretendió faltar al respeto de nadie, ni al deporte de sus amores y mucho menos a su equipo ni rivales.
Puig dice que sólo disfruta jugar al beisbol cada minuto, con máxima intensidad y entrega.
Sus metas en el 2015 y a futuro son claras, y asegura que tienen que ver más con logros individuales que con marcas personales.
Y algo es claro por completo. Puig está convencido de que llegó a las Grandes Ligas para triunfar.
"Sí tengo", respondió Puig en referencia a sus objetivos la próxima temporada de Grandes Ligas. "Pero las mías no son importantes. La primera que tengo es tener un buen equipo como el que tengo ahora, salir al terreno de juego todos los días para dar lo mejor de nosotros a los fanaticos. Llegar a los playoffs y ganar la Serie Mundial son la única metas".
"Las otras que son personales", añadió, "las mías no son tan importantes, sólo están en el camino, si Dios nos lo permite, con la preparación que tuvimos en el spring training".
Durante seis semanas, Puig se preparó para comenzar la que será su tercera temporada completa en las Grandes Ligas, desde que emigró de su natal Cuba a territorio estadounidense.
En apenas dos temporadas, Puig ha mostrado potencial para ser considerado uno de los peloteros que pueden marcar época con la legendaria franquicia de los Dodgers.
Puig aseguró que este año está listo para dar el brinco al siguiente nivel en todos los aspectos y junto con el resto de la multimillonaria nómina de su conjunto pelear por la Serie Mundial.
Pero sobre todo, con base en la preparación de un campamento primaveral, al que reportó una semana antes de que fuera obligatorio.
"Hace tiempo que estoy listo ya para comenzar la temporada", dijo. "Ya estamos todos bien preparados. Todos los equipos están preparados y todos los jugadores están en óptimas condiciones para comenzar la temporada".
Puig promedia .305 con el bate con 55 carreras producidas y 17 jonrones en sus dos primeros años ligamayoristas; en el 2014 bateó para .296 con 69 carreras impulsadas.
Pero él mismo reconoce que puede dar mucho más, como anticiparon los buscadores de talento de que lo vieron por vez primera en la selección cubana de beisbol.
Sólo, dijo, tiene que concentrarse más en su propio juego y olvidarse de todo lo que sucede a su alrededor en el ámbito extra deportivo.
"Este año he trabajado para no repetir los errores que hice el año pasado, como el corrido de las bases, el tiro al hombre que corta", reconoció. "Tengo que respetar más a mis jugadores, respetar más al staff de mi equipo. Y cosas así que he ido mejorando poco a poco y eso me va a ayudar mucho en mi carrera".
Parte de la madurez personal y profesional de Puig, de 24 años, dijo que se la debe a compañeros de equipo con los que ha alternado de manera cercana, como el mexicano Adrián González y últimamente Jimmy Rollins, quien llegó a los Dodgers para esta temporada.
Puig es un jugador de carácter extrovertido y juguetón.
Gusta de estar acompañado; divertirse con video juegos dentro y fuera de los estadios de beisbol; le agrada el tenis de mesa y el futbol.
Tiene amistad cercana con la mayoría de sus compatriotas en las Grandes Ligas y algunos otros que están por llegar.
Uno de sus amigos más cercanos es el prospecto cubano de los Gigantes de San Francisco Daniel Carbonell, quien dijo que Puig es una persona noble, de buen corazón y con un talento natural para el deporte como pocas veces visto.
"Es una gran persona", dijo Carbonell. "Uno de los mejores jugadores en la historia de Cuba. Tiene todas las herramientas, pero sobre todo inteligencia. A mi me da muchos consejos. Y entiende bien lo que se requiere para triunfar en este país y en este nivel". "No me sorprende lo rápido que le ha ido bien", agregó. "Tiene demasiado talento y mentalidad..."
Puig dijo que tratará de mostrar una actitud diferente en el terreno de juego, que por momentos ha sido considerado irreverente, presumido, prepotente y controversial, con aires de grandeza.
El cubano está consciente de que ha provocado esa imagen, aunque afirmó que nunca fue su intención.
"Es por la formade jugar que tengo, porque cuando uno está emocionado y disfruta el juego se abre, como cuando pego un jonrón y tiro el bate como yo...", manifestó. "Pero a mi se me ve mal. La gente piensa que como llevo poco tiempo en Grandes Ligas".
"Pero eso no significa el tiempo ni la cantidad que tu lleves", agregó, "solamente tratar de divertirse en el terreno y uno lo hace sin querer faltarle al respeto, al contrario".
Sino por la dirección que tenemos. Tenemos que ir 600 turnos al bate para poder dar 40 jonrones, mientras que los pitchers con tres jonrones pueden poncharnos a nosotros.
Puig está feliz con su vida de Grandes Ligas, con la que ha tenido oportunidad de conocer lugar y personas que ni siquiera pensó que existieran.
Es la actual portada de uno de los video juegos más importantes de la actualidad en las Mayores, MLB The Show. Fue parte de la gira de estrellas ligamayoristas más reciente por Japón y su jersey de los Dodgers se vende por doquier, más allá de Los Ángeles y la fronteras estadounidenses.
Sin embargo, niega de manera rotunda que se considera la nueva imagen del beisbol de las Grandes Ligas.
"¡No, no!... tengo que mejorar muchas cosas para ser la imagen de las Grandes Ligas", afirmó categórico. "Esas cosas no las decidido yo, las deciden todos los que votan y todas las personas que están en esto. Yo sólo hago mi trabajo y trato de seguir mejorando día a día".
"(Trato) de respetar más a las personas para que no estén diciendo de que no respeto el juego y todo eso...", agregó. "Es mi forma de jugar y desde chiquito siempre la he tenido. Pero voy a tratar de mejorar cosas para que ellos (críticos) vean que he estado mejorando día a día".
Después de más de seis semanas en las inmediaciones de Phoenix, preparando en las prácticas primaverales su próxima temporada, la que consideró será de su consagración en las Mayores, Puig volvió el miércoles pasado a su casa en Los Ángeles, ansioso para el Día Inaugural, su segundo en Las Mayores.
Cerró la Liga del Cactus con promedio de .286 al bate, cinco jonrones y 13 carreras producidas.
"Estoy listo, 'I'm ready'", sentenció. "Hace tiempo que estoy listo".
SCOTTSDALE, Arizona -- Yasiel Puig ha sido irreverente; más por pasión que por descontrol.
El jardinero de Dodgers de Los Ángeles sabe de que su estilo en el terreno de juego es considerado controversial, aunque nunca asegura que nunca pretendió faltar al respeto de nadie, ni al deporte de sus amores y mucho menos a su equipo ni rivales.
Puig dice que sólo disfruta jugar al beisbol cada minuto, con máxima intensidad y entrega.
Sus metas en el 2015 y a futuro son claras, y asegura que tienen que ver más con logros individuales que con marcas personales.
Y algo es claro por completo. Puig está convencido de que llegó a las Grandes Ligas para triunfar.
"Sí tengo", respondió Puig en referencia a sus objetivos la próxima temporada de Grandes Ligas. "Pero las mías no son importantes. La primera que tengo es tener un buen equipo como el que tengo ahora, salir al terreno de juego todos los días para dar lo mejor de nosotros a los fanaticos. Llegar a los playoffs y ganar la Serie Mundial son la única metas".
"Las otras que son personales", añadió, "las mías no son tan importantes, sólo están en el camino, si Dios nos lo permite, con la preparación que tuvimos en el spring training".
Durante seis semanas, Puig se preparó para comenzar la que será su tercera temporada completa en las Grandes Ligas, desde que emigró de su natal Cuba a territorio estadounidense.
En apenas dos temporadas, Puig ha mostrado potencial para ser considerado uno de los peloteros que pueden marcar época con la legendaria franquicia de los Dodgers.
Puig aseguró que este año está listo para dar el brinco al siguiente nivel en todos los aspectos y junto con el resto de la multimillonaria nómina de su conjunto pelear por la Serie Mundial.
Pero sobre todo, con base en la preparación de un campamento primaveral, al que reportó una semana antes de que fuera obligatorio.
"Hace tiempo que estoy listo ya para comenzar la temporada", dijo. "Ya estamos todos bien preparados. Todos los equipos están preparados y todos los jugadores están en óptimas condiciones para comenzar la temporada".
Puig promedia .305 con el bate con 55 carreras producidas y 17 jonrones en sus dos primeros años ligamayoristas; en el 2014 bateó para .296 con 69 carreras impulsadas.
Pero él mismo reconoce que puede dar mucho más, como anticiparon los buscadores de talento de que lo vieron por vez primera en la selección cubana de beisbol.
Sólo, dijo, tiene que concentrarse más en su propio juego y olvidarse de todo lo que sucede a su alrededor en el ámbito extra deportivo.
"Este año he trabajado para no repetir los errores que hice el año pasado, como el corrido de las bases, el tiro al hombre que corta", reconoció. "Tengo que respetar más a mis jugadores, respetar más al staff de mi equipo. Y cosas así que he ido mejorando poco a poco y eso me va a ayudar mucho en mi carrera".
Parte de la madurez personal y profesional de Puig, de 24 años, dijo que se la debe a compañeros de equipo con los que ha alternado de manera cercana, como el mexicano Adrián González y últimamente Jimmy Rollins, quien llegó a los Dodgers para esta temporada.
Puig es un jugador de carácter extrovertido y juguetón.
Gusta de estar acompañado; divertirse con video juegos dentro y fuera de los estadios de beisbol; le agrada el tenis de mesa y el futbol.
Tiene amistad cercana con la mayoría de sus compatriotas en las Grandes Ligas y algunos otros que están por llegar.
Uno de sus amigos más cercanos es el prospecto cubano de los Gigantes de San Francisco Daniel Carbonell, quien dijo que Puig es una persona noble, de buen corazón y con un talento natural para el deporte como pocas veces visto.
"Es una gran persona", dijo Carbonell. "Uno de los mejores jugadores en la historia de Cuba. Tiene todas las herramientas, pero sobre todo inteligencia. A mi me da muchos consejos. Y entiende bien lo que se requiere para triunfar en este país y en este nivel". "No me sorprende lo rápido que le ha ido bien", agregó. "Tiene demasiado talento y mentalidad..."
Puig dijo que tratará de mostrar una actitud diferente en el terreno de juego, que por momentos ha sido considerado irreverente, presumido, prepotente y controversial, con aires de grandeza.
El cubano está consciente de que ha provocado esa imagen, aunque afirmó que nunca fue su intención.
"Es por la formade jugar que tengo, porque cuando uno está emocionado y disfruta el juego se abre, como cuando pego un jonrón y tiro el bate como yo...", manifestó. "Pero a mi se me ve mal. La gente piensa que como llevo poco tiempo en Grandes Ligas".
"Pero eso no significa el tiempo ni la cantidad que tu lleves", agregó, "solamente tratar de divertirse en el terreno y uno lo hace sin querer faltarle al respeto, al contrario".
Sino por la dirección que tenemos. Tenemos que ir 600 turnos al bate para poder dar 40 jonrones, mientras que los pitchers con tres jonrones pueden poncharnos a nosotros.
Puig está feliz con su vida de Grandes Ligas, con la que ha tenido oportunidad de conocer lugar y personas que ni siquiera pensó que existieran.
Es la actual portada de uno de los video juegos más importantes de la actualidad en las Mayores, MLB The Show. Fue parte de la gira de estrellas ligamayoristas más reciente por Japón y su jersey de los Dodgers se vende por doquier, más allá de Los Ángeles y la fronteras estadounidenses.
Sin embargo, niega de manera rotunda que se considera la nueva imagen del beisbol de las Grandes Ligas.
"¡No, no!... tengo que mejorar muchas cosas para ser la imagen de las Grandes Ligas", afirmó categórico. "Esas cosas no las decidido yo, las deciden todos los que votan y todas las personas que están en esto. Yo sólo hago mi trabajo y trato de seguir mejorando día a día".
"(Trato) de respetar más a las personas para que no estén diciendo de que no respeto el juego y todo eso...", agregó. "Es mi forma de jugar y desde chiquito siempre la he tenido. Pero voy a tratar de mejorar cosas para que ellos (críticos) vean que he estado mejorando día a día".
Después de más de seis semanas en las inmediaciones de Phoenix, preparando en las prácticas primaverales su próxima temporada, la que consideró será de su consagración en las Mayores, Puig volvió el miércoles pasado a su casa en Los Ángeles, ansioso para el Día Inaugural, su segundo en Las Mayores.
Cerró la Liga del Cactus con promedio de .286 al bate, cinco jonrones y 13 carreras producidas.
"Estoy listo, 'I'm ready'", sentenció. "Hace tiempo que estoy listo".
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