 |
| Rusney tiene 15 anotadas, 14 remolques, 3 bases robadas, 32 hits y 5 extrabases en 39 partidos en el 2015 |
Por Jorge Ebro
Rusney Castillo no ha tenido el ascenso meteórico de algunos de sus compatriotas, pero poco a poco les está haciendo creer a los Medias Rojas que no se equivocaron cuando le dieron el mejor contrato en la historia para un pelotero cubano: $72.5 millones.
El cubano no pudo alinear con Boston el día inaugural de la temporada y cuando tuvo su primer chance del 2015 no produjo como el equipo esperaba, pero tras una estancia en Triple A y con la partida de Shane Victorino, recibió una nueva oportunidad que está aprovechando al conectar para .333 con un OPS de .819 en las últimas dos semanas.
Todo parece indicar que estos últimos dos meses de contienda serán cruciales para el jugador de 28 años nacido en Ciego de Avila. Las expectativas siguen siendo altas y no dejan de apuntar a ese pacto que de solo mencionarlo corta el aliento.
Ahora pareces un pelotero distinto del que inició la temporada.
"Sí, cuando me bajaron a las Menores trabajé mucho en diversos aspectos de mi juego y también me concentré en recuperarme físicamente para estar al 100 por ciento en el momento en que me llamaran de vuelta''.
En Boston hablan de acortar tu swing, de hacerlo más compacto.
"Ese es un tema que sigue a todos los peloteros cubanos. Con el llamado swing corto lo que quieren es que uno vea mejor los lanzamientos, que los pueda batear en todos los rincones de la zona de strike sin quitarle el ojo a la pelota. El swing largo deja agujeros en el recorrido del bate''.
¿Te sorprendió el cambio del béisbol cubano a las Mayores?
"Mentalmente me preparé para estar abierto a los cambios, a los ajustes. Sabía, porque había hablado con mucha gente, de que las cosas no iban a salir de la noche a la mañana y que habría un período de avances y retrocesos. Tal vez es mejor que las cosas sucedan de esta manera''.
¿Sientes presión por ser el cubano con el contrato más grueso?
"El contrato es grande, pero no pienso en eso. Solo trato de salir al terreno y dar lo mejor de mí. Creo que si uno es productivo y ayuda al equipo a ganar, lo monetario pasa a un segundo plano. Siempre me digo que no puedo ser complaciente conmigo. He llegado. Ahora estoy luchando por mantenerme. Así que cuando voy a jugar el contrato queda atrás''.
Y en el aspecto humano, ¿ya te adaptaste a la vida en este país?
"Si supieras que me he adaptado muy bien. He tenido el apoyo de mucha gente, de amigos y familiares que me han hecho más fácil la transición. No tengo excusas para no hacer bien las cosas en el terreno''.
¿Te sientes bien con los Medias Rojas?
"A pesar de que las cosas no han funcionado a nivel de equipo, la presencia latina ha sido muy importante para mí, sobre todo la de David Ortiz. Admiro mucho a Big Papi y más tarde en mi vida podré decir con orgullo que estuve a su lado
Rusney Castillo no ha tenido el ascenso meteórico de algunos de sus compatriotas, pero poco a poco les está haciendo creer a los Medias Rojas que no se equivocaron cuando le dieron el mejor contrato en la historia para un pelotero cubano: $72.5 millones.
El cubano no pudo alinear con Boston el día inaugural de la temporada y cuando tuvo su primer chance del 2015 no produjo como el equipo esperaba, pero tras una estancia en Triple A y con la partida de Shane Victorino, recibió una nueva oportunidad que está aprovechando al conectar para .333 con un OPS de .819 en las últimas dos semanas.
Todo parece indicar que estos últimos dos meses de contienda serán cruciales para el jugador de 28 años nacido en Ciego de Avila. Las expectativas siguen siendo altas y no dejan de apuntar a ese pacto que de solo mencionarlo corta el aliento.
Ahora pareces un pelotero distinto del que inició la temporada.
"Sí, cuando me bajaron a las Menores trabajé mucho en diversos aspectos de mi juego y también me concentré en recuperarme físicamente para estar al 100 por ciento en el momento en que me llamaran de vuelta''.
En Boston hablan de acortar tu swing, de hacerlo más compacto.
"Ese es un tema que sigue a todos los peloteros cubanos. Con el llamado swing corto lo que quieren es que uno vea mejor los lanzamientos, que los pueda batear en todos los rincones de la zona de strike sin quitarle el ojo a la pelota. El swing largo deja agujeros en el recorrido del bate''.
¿Te sorprendió el cambio del béisbol cubano a las Mayores?
"Mentalmente me preparé para estar abierto a los cambios, a los ajustes. Sabía, porque había hablado con mucha gente, de que las cosas no iban a salir de la noche a la mañana y que habría un período de avances y retrocesos. Tal vez es mejor que las cosas sucedan de esta manera''.
¿Sientes presión por ser el cubano con el contrato más grueso?
"El contrato es grande, pero no pienso en eso. Solo trato de salir al terreno y dar lo mejor de mí. Creo que si uno es productivo y ayuda al equipo a ganar, lo monetario pasa a un segundo plano. Siempre me digo que no puedo ser complaciente conmigo. He llegado. Ahora estoy luchando por mantenerme. Así que cuando voy a jugar el contrato queda atrás''.
Y en el aspecto humano, ¿ya te adaptaste a la vida en este país?
"Si supieras que me he adaptado muy bien. He tenido el apoyo de mucha gente, de amigos y familiares que me han hecho más fácil la transición. No tengo excusas para no hacer bien las cosas en el terreno''.
¿Te sientes bien con los Medias Rojas?
"A pesar de que las cosas no han funcionado a nivel de equipo, la presencia latina ha sido muy importante para mí, sobre todo la de David Ortiz. Admiro mucho a Big Papi y más tarde en mi vida podré decir con orgullo que estuve a su lado
Comentarios
Publicar un comentario
Formulario de comentarios