Grandes Ligas desesperada por negociar con Cuba, pero el embargo le ata las manos

EL COMISIONADO del Beisbol, Rob Manfred, conversa con la prensa en un encuentro con los propietarios de equipos este jueves en Coral Gables. Foto: Lynne Sladky AP

Por Jorge Ebro

Si estuviera en manos de los ejecutivos de Grandes Ligas, el pacto con las autoridades cubanas ya sería una realidad que abriría las puertas del mejor béisbol del mundo a los jugadores de la isla.

Pero a juzgar por las palabras de quienes rigen las Mayores, ese acuerdo todavía no pasa de ser un deseo y podría demorar más de lo que desean en la Oficina del Comisionado, Rob Manfred, y en los pasillos del Instituto Cubano de Deportes (INDER).

"Esto es más complicado que un acuerdo con Cuba'', expresó Manfred, de visita en Miami para un encuentro con los propietarios de clubes. "El acuerdo que nos gustaría es uno que permita a los jugadores venir aquí y regresar a casa. Eso va a requerir de grandes cambios en las regulaciones de los Estados Unidos. Va a hacer falta mucho más que el béisbol para ver un tipo de acuerdo así''.

De acuerdo con una fuente, sobre el escritorio de Manfred, ya estaría una primera aprobación de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC), dando el visto bueno a que los peloteros firmados desde Cuba puedan repatriar sus ganancias, un paso fundamental para implementar cualquier pacto.

Sin embargo, quedan muchos puntos por resolver y nada tendría vigor hasta que se produzca un resquebrajamiento en la Ley del Embargo, un proceso que demoraría atrapado en la burocracia del Congreso.

Es de dominio público que las Mayores pidieron un permiso especial para negociar con la isla, a la espera de una acción ejecutiva del presidente Barack Obama, quien ve con buenos ojos esta "Diplomacia del Béisbol''.

¿Qué pudiera hacer el presidente?

"Nuestra conversaciones con la administración [de Obama] me convencen del interés en cumplir con el objetivo fijado por el presidente [de restablecer relaciones plenas con Cuba]'', agregó Manfred. "Continuaremos trabajando con ellos para lograr este cambio que creemos será beneficioso para nuestro negocio''.

Recientemente, una delegación de las Mayores, encabezada por Joe Torres e integrada por cuatro peloteros nacidos en la isla, realizó una visita de buena voluntad, donde también se incluyeron altos representantes del cuerpo legal de la institución y del sindicato de jugadores.

Lo que se discutió allí el pasado diciembre sigue siendo un misterio, pero solo contribuyó más al deseo de abrir cuanto antes el mercado cubano.

"Uno pudo ver el potencial de talento, como lo que fue una vez en el pasado'', apreció Torre, vicepresidente de las Mayores. "Lo que aprendí de primera mano allí es que el béisbol es una religión. La gente sabe del juego, conoce a los jugadores, y espero que algo se pueda desarrollar. Es algo que va más allá del béisbol. Les toca a los gobiernos. Estamos esperanzados de que algo suceda. Tenemos que encontrar algún terreno común''.

Algunos se mantienen optimistas y consideran que la vista de Torre, y los cuatro peloteros antillanos -Yasiel Puig, José Abreu, Brayan Peña y Alexei Ramírez- significó un paso de avance fundamental para ese potencial acuerdo.

Y es que sin duda, la presencia de quienes hasta hace poco eran considerados traidores por las autoridades, de cierto modo dejó entrever cierta capacidad de maniobra y pragmatismo dentro de la isla para apostar por un acuerdo que eliminaría -esa es la idea- la hemorragia de peloteros que ha dejado en el esqueleto a las Series Nacionales.

Al parecer, en la isla se estaría desarrollando una batalla interna entre los propulsores de un acuerdo, encabezados por Antonio Castro, uno de los rectores de la pelota cubana y especie de embajador para luchar por la vuelta del béisbol a los Juegos Olímpicos; y otros elementos de la vieja guardia dentro del Instituto Cubano de Deportes (INDER) y el propio gobierno de su tío, Raúl Castro.

En algún momento de la vista de las Mayores a La Habana se le escuchó a Castro comentar el trabajo que le había costado lograr la entrada de los cubanos y en entrevista a la cadena ESPN habló de que eso era apenas un primer paso.

Otros apuntan a que el camino hacia un pacto entre la mayor de las Antillas y las Grandes Ligas todavía debe sortear fuertes obstáculos de ambas partes, como la modalidad del acuerdo o quién representará -algo que preocupa a los agentes- legalmente a los peloteros, entre otros temas.

"No sabemos si se utilizará un sistema de posting como el japonés o se seguirá el rumbo de las ligas invernales del Caribe, ¿cómo se van a repartir los salarios?'', apuntó Bart Hernández, un conocido agente de cubanos en las Mayores. "Creo que ese pacto será bueno para los jugadores, pero hay muchos detalles por precisar''.

En medio de todo esto se encuentran los peloteros a ambos lados del estrecho de la Florida, en Miami esperanzados de volver de manera normal y sistemática a sus familias; y en Cuba aquellos que sueñan con jugar en Grandes Ligas sin tener que recurrir a intermediarios -lancheros y contrabandistas- para firmar contratos millonarios o de Ligas Menores.

"Todos esperamos que sucedan cosas buenas y las cosas sigan cambiando'', apuntó recientemente en Miami Yoenis Céspedes, una de las más grandes estrellas del momento y el gestor inicial del viaje de sus compatriotas a La Habana. "Vamos a ver qué pasa en lo adelante. Al final todos queremos lo mejor para el béisbol y los cubanos''.

Comentarios

  1. Pero Estados Unidos no es un país libre ? Por qué tiene que estar pidiendo permiso, por qué tienen leyes que violan la libertad de tomar decisiones a sus ciudadanos ??

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  2. En efecto, si eso sucede en Estados Unidos, que es un país libre, una democracia con sus virtudes (muchas)y defectos - inevitables, no se puede satisfacer plenamente a todo el mundo -, imagínate entonces cómo es la cosa en Cuba dónde no se respetan los derechos ni libertades más elementales, sobre todo en lo económico y el acceso libre a la información porque es una dictadura. Al menos en Estados Unidos la presión de la opinión pública puede cambiar la política en casi cualquier aspecto de la vida en el país. En Cuba, eso ni soñarlo. Se creen - y en la práctica así ha sido y es - los dueños del país, según la clase gobernante ellos "saben" lo que le "conviene" al "pueblo", lo entrecomillo porque no es un pueblo, es un rebaño para éstos vivos que llevan casi 60 años viviendo a costa de su propio pueblo.

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  3. Luis....puedo o no estar de acuerdo con algunas cosas que dices al igual que el primero que escribió, pero creo que te faltó el paréntesis después de defectos (que también son muchos al igual que las virtudes)..al igual que en Cuba hay muchas virtudes y defectos...la discusión sobre la dictadura no creo que tenga nada que ver con la PELOTA.....todos los cubanos debemos quitarnos la política de la cabeza cuando se habla de otros temas (los de aquí-Cuba- y los de allá también). Saludos David

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  4. David, es inevitable la respuesta con el aspecto político a esa pregunta, no por que lo quiera yo, sino porque es el gobierno cubano el que ha politizado todo....y eso continúa. La pregunta no es inocente. Por cada ley con la que la administración estadounidense viola las libertades de sus ciudadanos, en Cuba hay 20 leyes que violan las libertades de sus ciudadanos. Y la PELOTA es lo más politizado, si cabe, que hay en Cuba. Y cualquier otra consideración al respecto, por respetable que sea, es querer tapar el sol con un dedo, un hábito muy arraigado en las autoridades cubanas. No quiero hablar de política pero es muy, pero que muy difícil no hacerlo en el caso de Cuba. Es el monstruo, el Frankestein que han creado. Saludos.

    Pd: Soy de la opinión de que la administración y el congreso de Estados Unidos permitan el libre flujo de peloteros al beisbol profesional norteamericano. Ahora bien, quiero ver si el gobierno cubano (impuestos aparte)respeta el fruto del trabajo de los peloteros, jueguen en Grandes Ligas o Ligas Menores. Que el pelotero elija libremente dónde (según las leyes)invertir sus dinero en Cuba, además de no depender de ningún organismo, ni de ningún político para firmar con quién crea conveniente, acorde con las ofertas que reciba.
    Sinceramente, eso no lo veo aun en Cuba, ojalá me equivoque.

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