Borrero es el nuevo rey del doble en Cuba


Por Osvaldo Rojas

El trono de los dobles en nuestros campeonatos nacionales tiene desde este domingo un nuevo rey: el villaclareño Ariel Borrero Alfonso, quien rompió el abrazo que sostenía con el estelar antesalista Michel Enríquez Tamayo, al largar el tubey número 411 de su carrera, en su tercera vez al bate en el choque en el que los Tigres de Ciego de Ávila iniciaron con nocao, 14-4, su andar por las semifinales de la 55 Serie Nacional de Béisbol.

El refuerzo Miguel Lahera desde la lomita de los Industriales fue la víctima de la histórica conexión en el cuarto capítulo, después que el veterano inicialista de 44 años de edad falló en línea al bosque izquierdo en el primero y se embasó por error en el segundo. En total bateó de 5-3 y recibió una base por bolas.

En su hogar santaclareño nadie quiso perderse el instante inolvidable. «Aquí todo el mundo estaba pendiente al televisor y se nos salieron las lágrimas porque no podíamos estar allí, pero fue muy emocionante ver cómo el equipo entero salió a felicitarlo», declaró a Vanguardia, Yeiny Santos Toledo, la mujer que le ha dado dos hijos: Ariel, de 10 años, y Arianna, de 6.

«Le pasé un mensaje cuando conectó el doble y después enseguida me llamó y me dijo que estaba de lo más contento, que lo único que sentía era que no estuviéramos allá para disfrutarlo juntos», agregó Yeiny.

Solitario miembro del club de los que han largado más de 400 biangulares y 2000 inatrapables, Ariel no solo se ha convertido en el soberano de los biangulares en los certámenes domésticos sino también en el único villaclareño en comandar un departamento ofensivo en la pelota cubana, después que Enriquito Díaz Martínez rebasó las 588 estafas de Víctor Mesa Martínez en el 2003.

Borrero ha logrado 9 contiendas de 20 o más dobletes, seis de ellas consecutivas desde la temporada de 1998-1999 a 2003-2004. Su máxima cantidad la registró en la versión 1999-2000 con 27, cifra que igualó en el certamen de 2007-2008.

Un poco de historia

El desaparecido camagüeyano Daniel Hernández Hernández fue el primero en rubricar un estacazo de estas características en nuestros campeonatos. Posteriormente se estableció una fraternal pugna entre Elpidio Mancebo Pérez y Miguel Cuevas Piedra, quienes indistintamente se turnaron el liderato e incluso archivaban 92 dobles cada uno en el epílogo de la X Serie (1971).

Sin embargo, a partir de 1972 cuando marcó un hito al ser el primero en redondear la centena de tubeyes, Mancebo fue el soberano indiscutible de este departamento hasta que en la selectiva de 1981 Antonio Muñoz sobrepasó los 221 registrados por el santiaguero.

El Gigante del Escambray asumió el mando por espacio de 20 años y en el campeonato de 2000-2001, ya en las postrimerías de su carrera Antonio Pacheco Massó superó la primacía de 355 que en 24 justas dejó estampada el mejor bateador zurdo del periodo revolucionario.

Pacheco gobernó poco tiempo, pues en la lid de 2002-2003 el capitalino Javier Méndez González dejó atrás los 366 del sobresaliente intermedista de las Avispas y cerró su expediente beisbolero con 381 cañonazos de dos bases.

En la cita del 2006-2007 el granmense Víctor Vicente Bejerano Morales tomó la delantera con 382, pero el 26 de enero de 2012, Rolando Meriño Betancourt rompió esa marca y concluyó su accionar por los diamantes beisboleros criollos con 405, dígito que Michel Enríquez propasó en el campeonato de 2014-2015.

Justamente en los inicios de la presente serie en los 9 choques en que intervino el brillante antesalista de los Piratas de la Isla de la juventud había fijado en 410 la primacía que Borrero acaba de pasar.

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