Llegó la hora de trabajar para Yoenis Céspedes


Por Marly Rivera

El inicio de los partidos de exhibición primaveral de los Mets de Nueva York no pudo haber llegado en un mejor momento para Yoenis Céspedes.

Tras semanas donde el enfoque mediático estuvo en sus exóticos automóviles, montar a caballo, la compra de un cerdo en una feria agrícola, sus habilidades como golfista y la forma en que lleva su gorra, el jardinero cubano se declaró centrado en su preparación y desempeño dentro del terreno.

“Todo eso sucedió antes que empezaran los juegos. Ya empezaron los juegos. Hay otra mentalidad. Vengo aquí a enfocarme en el trabajo que tengo que hacer”, dijo Céspedes a ESPN Digital. “Ya todas esas cosas quedaron atrás. Ya empezaron los juegos de entrenamiento, ahora estoy enfocado en prepararme bien para tener una buena temporada y ayudar al equipo”.

Sin embargo, el toletero de 30 años agregó que le ha tenido sin cuidado la amplia atención que los medios neoyorquinos le han dedicado a todo menos al béisbol.

“No me molesta, porque no le doy importancia a eso. Yo no he hecho nada malo, por eso no me preocupa lo que hablen de mí”, señaló. “Jugué tres años en Oakland y me acostumbré que la prensa era muy poca. Cuando me cambiaron para Boston se me hizo difícil; había mucha prensa. Pero ya cuando llegue aquí, ya vi como es el ambiente y me siento cómodo con eso”.

Céspedes ya ha jugado varios partidos de exhibición como bateador designado, pero el dirigente Terry Collins anunció que su debut primaveral como jugador de posición será este miércoles contra los Yankees de Nueva York, donde se anticipa jugará en el jardín central.

“La Potencia” fue jardinero central en Cuba antes de su deserción para firmar un contrato de cuatro años con los Atléticos de Oakland previo al inicio de la temporada 2012.

“En Cuba esa era mi posición original, pero llegue aquí en el 2012 y empecé a jugar center field, y ese mismo año me movieron al left field”, explicó. “Ese año se me hizo un poco difícil, pero ya después me acostumbré. Ahora me siento mucho más cómodo en el left field. Pero mi mentalidad, y siempre lo he dicho, es que todo quien es jardinero que esté entre la media puede jugar cualquier jardín”.

Céspedes señaló que no ha discutido el tema con el dirigente metropolitano, pero igual confía en poder hacer los ajustes necesarios que requiere el cambio de posición.

“El recorrido de la bola es muy diferente. En center field uno tiene más tiempo, pero tiene que desplazarse más. El sentido de la bola, eso es lo que hay que recuperar. Saber a volver a leer bien la bola cuando sale del bate”, aclaró. “Si me dieran a escoger, me quedaría en el left field, pero juego donde el equipo me necesite. Si tengo que jugar center field, voy a jugar center field y voy a hacer lo mejor que pueda”.

El cubano tuvo un impacto inmediato en la ofensiva de los Mets tras su adquisición de los Tigres de Detroit durante la fecha de canje de verano, acumulando 17 cuadrangulares en sus primeros 39 partidos, la segunda mejor marca en la historia de las Grandes Ligas para un pelotero que haya cambiado de equipo a media temporada (1997: Mark McGwire, 24 HR).

No obstante, Céspedes terminó el año en una baja ofensiva, con un promedio de bateo de .218, sin cuadrangulares, en sus últimos 55 turnos en 16 partidos. En playoffs, el cubano tuvo un sólido inicio en las series divisionales y de campeonato, pero registró un promedio de apenas .150 en la Serie Mundial.

“Creo que no podía mantener ese ritmo. Eso era prácticamente imposible”, declaró. “Llevo cuatro años en Grandes Ligas, pero como quiera, al jugar todos los días uno se cansa. Cuando estaba en la Liga Americana, cuando me sentía cansado, pedía un día de descanso y me ponían de bateador designado. En la Liga Nacional no hay DH y tengo que jugar todos los días, esté cansado o no, porque tengo que ayudar al equipo. Creo que eso me pasó a mí”.

Céspedes ha estado trabajando arduamente con el coach de bateo, Kevin Long, con quien ha desarrollado una amistad muy cercana. El cubano explicó que su relación con Long está fundada en un respeto mutuo y en que el coach metropolitano basa sus enseñanzas en reforzamiento positivo.

“Él ha trabajado con Alex Rodríguez y trabajó con Manny Ramírez, que son dos de los mejores bateadores que han pasado por todas las Grandes Ligas”, indicó. “Como él me dice, uno no puede cambiar de un día para otro. Toma tiempo, pero hay que empezar a trabajar desde ahora y lo estoy trabajando”.

“Siempre me está dando la confianza que necesito. Me dice que no me preocupe, que voy a estar bien”, agregó el jardinero de 30 años, que firmó un contrato de tres años y $75 millones con los Mets durante la temporada baja.

“Él no quiere hacer un cambio completo de mi swing, si fuera así, no trabajaría con él. No voy a permitir que nadie me cambie el swing, porque me pasó en el 2013. Me estuvieron diciendo que los cubanos teníamos el swing muy largo. Buscamos ejercicios para tratar de acortar un poco más mi swing, y lo que hice fue que bateé menos y perdí fuerza. Eso no lo voy a intentar más”, afirmó Céspedes.

“Todos los días se aprende algo nuevo y hay que limar algunos detallitos, pero uno lo aprende con el tiempo. No quiere decir que porque a mí me falte aprender alguna cosa o hacer alguna cosa de otra forma, no voy a tener buenos resultados”.

Comentarios

  1. Si , si , a jugar y está bueno ya de boberias que tiene que hacer un buen papel porque sino sus adulones caen en depresión y no van a cuidar bien las vacas y los terneros

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  2. Aquí estoy entrando para recordarte lo que eres y ya sabes, eres und IDIOTA MAYUSCULO y encima envidioso.

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