Yosvani Torres recuerda como quedó fuera del Cuba en el 2011. Foto: Reynier Batista |
Por José R. Concepción.
Los Panamericanos han sido experiencias bastante negativas para Yosvani Torres. Primero en Guadalajara 2011 no hizo el equipo pese a alcanzar 10 victorias en la fase clasificatoria e imponer el récord de seis ganados para un play off.
Un ciclo más tarde, en Toronto 2015, fue sustituido por el manager Roger Machado en la sexta entrada cuando vencía 5-1 a Estados Unidos en la semifinal. Cuba terminaría derrotada en un partido que no se le olvida a Yosvani Torres.
No obstante, el balance de su experiencia internacional es satisfactorio, sobre todo tras el juegazo lanzado en la final de la Serie del Caribe 2015, cuando llevó a Cuba a ganar ese torneo 55 años después. A sus 36 abriles sueña con participar en el IV Clásico Mundial y probar su calidad en una liga foránea.
Decías que cuando fuiste a Holguín apenas habías salido de Pinar del Río y pocos años después integras tu primera selección nacional en un torneo en Holanda ¿Cómo fue esa experiencia para ti, desde el punto de vista deportivo y personal?
Es un poco fuerte, desde que llegas a otro país notas las diferencias en cuanto a las costumbres, el clima, la comida. En Holanda pasé una semana sin comer arroz, esas cosas te afectan (risas).
Desde el punto de vista deportivo lancé bastante bien. Le abrí en tres ocasiones a China Taipéi en una semana, perdí dos veces tras dejar el juego dos por una en el octavo con corredores en bases. Noté que el tenedor mío les era difícil, que la recta era incómoda a pesar de no tener velocidad. Fue una experiencia muy bonita, todo el mundo quiere hacer el equipo Cuba, aunque sea una selección B.
Pero para los Panamericanos y el Mundial de 2011, a pesar de tu gran año en la Serie 50 y de que Alfonso Urquiola era el DT, no hiciste el grado ¿A qué crees que se debió tu ausencia?
Nunca me ha gustado guiarme por los demás, mucha gente me hizo comentarios que no me agradaron. Me hablaron mal de Urquiola… a ciencia cierta no sé quién no quiso llevarme. Creo que por mi rendimiento pude haber estado, pero nadie me explicó las razones de mi ausencia. No fui y Urquiola era el director del equipo, pero habría que haber estado ahí para saber de quién fue la decisión.
A veces se critica con desconocimiento, porque eso no depende sólo de una persona. Depende de varios técnicos, de la Comisión de Béisbol y hasta de la dirección del país. Pienso que Urquiola fue el que más lo sufrió. Todavía hablo con él y siento que aquello no se le olvida, sin embargo yo sí pude olvidarlo.
Hubiese sido un gran logro participar en un Mundial, en un Panamericano, topar con jugadores de otros países, formar parte del equipo Cuba. Fue un golpe duro, pero lo asimilé como perder una batalla y no la guerra. Intenté seguir superándome y ser mejor en el futuro.
Luego de la Serie 53 todo fue diferente. Representaste a Cuba en la Serie del Caribe y ganaste el histórico juego de la final.
Ese juego significó mucho. Era un partido cerrado, no existía ningún margen para equivocaciones. Aquel día se notó toda la preparación que había hecho para ese tipo de momentos. Después de una actuación así, pude decirme: “estás listo para el equipo Cuba de verdad”. Con poca experiencia internacional pude hacerlo bien, fue un gran incentivo para mí. Creo que ha sido el mejor momento de mi carrera internacional.
¿Y cuál ha sido el peor?
En los Panamericanos de Toronto 2015… el partido que dejé ganando cinco por una contra Estados Unidos en la semifinal. Sabía que podía haber ganado ese juego. Tenía mucha confianza y estaba seguro de que mi estrategia de picheo podía seguir funcionando. Además, los relevistas estaban bien cansados. Pero de pronto me complico y me voy del box… No lo esperé, pensaba que merecía un poco más de confianza.
Luego perdimos y ese ha sido el momento más duro de toda mi carrera deportiva. Si lo hubiésemos ganado no habría importado, porque lo que importa es el equipo, no quien se anote la victoria.
Antes del juego había hablado con Raciel Sánchez (entrenador de picheo de PR y del equipo Cuba). Le dije: “prepara a los demás lanzadores para discutir el oro, que el día del cruce soy yo solo, no hace falta más nadie”. Cuando tuve ventaja de cinco carreras, di el juego por ganado, sólo restaba hacer bien mi trabajo. Sin embargo, después de hablarlo, de sentirme en capacidad de lanzar todo el juego y de estar demostrándolo, me quitaron. En ese momento sentí como si hubiese perdido todo el trabajo realizado durante años. Fue como perder una parte de mi carrera. Se me escapó llevar al equipo Cuba a una final panamericana. Ese ha sido el momento más duro, ni cuando me tuve que ir de Pinar del Río.
¿Crees que se ha sido injusto contigo en la conformación de los equipos Cuba?
Se tiene una perspectiva errónea al creer que un muchacho sin experiencia se merece ir a la selección nacional sólo porque su velocidad supera las 90 millas. Al contrario, se le debe enseñar que el atleta debe tener paciencia y pulir muchos detalles.
Entonces, a los lanzadores más maduros, que tienen menos velocidad, se les apartada con facilidad. Para los eventos cortos, que demandan mucho esfuerzo mental, es mejor valorar a los atletas por su trabajo no por su proyección futura. El béisbol no es sólo tener grandes condiciones físicas.
¿Cuáles son tus metas futuras?
Me gustaría ir al IV Clásico Mundial. Voy a prepararme lo mejor posible para ayudar a Pinar del Río en la próxima Serie y de ser posible integrar el equipo Cuba para el Clásico.
También me encantaría jugar en una liga extranjera para probarme fuera de Cuba. Aunque lo más importante es cuidarme físicamente y prepararme bien para lanzar hasta que pueda. El próximo mes cumpliré 36 años, pero confío en seguir lanzando, estar lo mejor posible dentro de mis posibilidades.
No he leído el articulo, por qué?.....porque es llover tras lo mojado,,,,,,,,,,no quiere decir que su historia no sea meritoria de leerla, ni diferente a otras,,,,,, pero la esencia es la misma,,,,una injusticia, como la de Vladimir en ese mismo equipo, etc,etc,,,,y para que contar, que yo creo que pasan de cientos, recuerden desde Osvaldo Oliva, pasando por Junco y Romelio (que trabajo le dio hacer al menos un Cuba), recuerden a Tony González, recientemente fallecido, que en la selectiva tuvo un OBP de más de 500, y hay mas....Machado y paro de contar.......con Machado fue el colmo....Lo dejaron fuera de la "preselección". La protesta no se hizo esperar, comenzando por el difunto Eddy Martin, hicieron un extra,subieron a 26 la pre y enseguida, lo eliminaron....Pero las injusticias no pararon, sino hay otras muchas,a favor de peloteros que disminuyeron sus rendimientos en las series nacionales y siguieron yendo al Cuba.........Discúlpame Torres por no leer tu historia.
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