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| La lesión de Iglesias ocurrió cuando se deslizó en su carrera desde tercera base al home Web Screen Shot |
Por Juan Páez / @jmanupz
En una jornada del spring training de Grandes Ligas con pocos juegos y sin muchos cubanos en acción, José Iglesias se lesionó y salió del encuentro por los Tigres de Detroit luego de tomar apenas un turno. Con el madero, Yonder Alonso contribuyó al festival de batazos que ganaron los Atléticos de Oakland 21-13 sobre los Diamondbacks de Arizona, cual si fuera un partido de fútbol americano.
En cuanto a “Candelita”, el problema físico ocurrió cuando se deslizó en su carrera desde tercera base al home. Ahí, donde llegó quieto, chocó con la pierna de Ryan Hanigan, experimentado receptor de los Filis de Filadelfia. Esa acción le generó una contusión en el cuello y estuvo cerca de producirle una conmoción, pero por suerte del joven campocorto no pasó a mayores.
“Más o menos pude verlo”, contó el mánager del conjunto bengalí, Brad Ausmus, a MLB.com. “Al principio yo pensé que él (Iglesias) recibió el golpe en la barbilla, pero terminó siendo el cuello. Desde el ángulo en el que estaba sentado, podía ver a través de las piernas del catcher. No es nada grave, está día a día”.
El capitalino ligó de 1-1 con su primer doble de la pretemporada y una anotada que le costó seguir en el juego, al colisionar con Hanigan. Este fue apenas su tercer indiscutible de los encuentros de preparación, en 16 viajes legales al plato.
Alonso metió mano en paliza
Entre las 21 carreras y los 17 incogibles que registró la toletería de los Atléticos de Oakland en el triunfo 21-13 sobre los Diamondbacks de Arizona, hubo aporte cubano. El bate de Yonder Alonso dio signos vitales y, con sus piernas, anotó en par de oportunidades.
El nativo de La Habana terminó la jornada con par de inatrapables en trío de chances oficiales en la caja de bateadores. Uno de esos hits fue su primer doble de la pretemporada, ante un apaleado Shelby Miller, abridor de los desérticos. En total, el designado y primera base suma cuatro imparables en 12 turnos, con un doble y un estacazo de vuelta completa, con cuatro boletos.
Es eso precisamente lo que el equipo de la bahía necesita de Alonso: una mayor cantidad de extrabases y, sobre todo, más paciencia en el plato, algo que se traduciría en más bases por bolas. Cuando logre ser más completo en esos citados aspectos, habrá explotado gran parte del potencial que siempre ha mostrado.
“Yo definitivamente creo que él (Alonso) puede ser mucho mejor de lo que ha sido, y pienso que él tiene esa mentalidad para afrontar esta nueva temporada”, dijo el coach de bateo de Oakland, Darren Bush, al portal web de la Major League Baseball. Al final del año pasado, hablamos demasiado sobre los ajustes que él quería hacer y cómo queríamos nosotros que él los hiciera. Ahora empezamos a ver que él se está sintiendo mucho más confiado como bateador y mucho más disciplinado y selectivo. Es justo eso lo que queremos”.
En otros resultados de los cubanos en las Grandes Ligas:
Aunque con un imparable empujó una anotación, Adonis García (3B) no pudo evitar que los Bravos de Atlanta perdieran 6-3 contra los Piratas de Pittsburgh. El tercera base se fue de 3-1 con anotada, además de la producida.
Por los Dodgers de Los Ángeles, que tuvieron en acción a tres peloteros cubanos, Yasmani Grandal pegó el único indiscutible entre los isleños vestidos con el uniforme de los californianos. Grandal ligó de 3-1, con un ponche. Yasiel Puig y José Miguel Fernández fallaron cada uno en par de turnos, aunque Puig revistó.
Rusney Castillo (BOS), como rightfielder y centerfielder eventualmente, tuvo un chance legal al plato y fue retirado por la vía del tercer strike.
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