Un tema que varias veces ha salido a debate y hoy lo alimentamos desde tres comentarios que defienden a Ariel Pestano, Pedro Medina y Juan Castro |
Por Joel García.
Un tema que varias veces ha salido a debate y hoy lo alimentamos desde tres comentarios que defienden a Ariel Pestano, Pedro Medina y Juan Castro. ¿Alguien los excluiría entre los mejores de esa posición en Cuba en los últimos 50 años? Si se anima a compartir o discrepar de estas opiniones puede escribirnos a nuestro correo.
Cualquier análisis en el béisbol, más si se trata de comparaciones entre jugadores, siempre llevan tironazos de simpatías personales, estadísticas arropadas a su mayor fortaleza (defensiva u ofensiva), algún que otro criterio consensuado de especialistas y, como si todo lo anterior fuera poco, el impacto dejado en la memoria a sus seguidores.
Detrás del home han pasado por Cuba excelentes receptores, incluso antes de nuestras series nacionales. Es una posición que demora años en dominarse y su maestría no queda resumida solo en un buen porciento de cogidos robando, sino en la dirección de un staff de pitcheo, en la defensa férrea de su posición (recibir pelotas contra la tierra o tiros de los jardines) y en la conducción total del juego a la hora de colocar la defensa para cada bateador.
Un catcher de excelencia si produce a la ofensiva será mucho mejor, pero en casi todas las ligas profesionales del mundo valen más para los directores los aventajados a la defensa que un sobresaliente al madero “guante de palo”, con las excepciones que siempre existen y existirán.
El villaclareño Ariel Pestano jugó 22 series nacionales, y en al menos 16 fue casi insustituible en su equipo naranja y en la selección nacional. De hecho es quien más largo período de tiempo ha sido titular de esa posición con las cuatro letras en el uniforme.
Una de sus tantas virtudes era resumir en su desempeño la elegancia de Juan Castro para mascotear, el coraje de Lázaro Pérez y Evelio Hernández en situaciones tensas, el virtuosismo de Alberto Martínez para guiar a los lanzadores, la potencia de tiro a las bases de Pedro Medina, la seguridad de Juan Manrique y la efectividad de Roger Machado ante estafadores de almohadillas.
También tenía su propio estilo. Valiente, peleón, líder, oportuno al bate y preferido por el mejor cuerpo de lanzadores de 1998-2013: Pedro Luis Lazo, Norge Luis Vera, José Ariel Contreras, Adiel Palma, Yadier Pedroso, José Ibar y Ormari Romero, por mencionar algunos.
Sus enseñanzas y ejemplo andan hoy apegadas a la frase que le regalara el puertorriqueño Iván Rodríguez (13 veces Guante de Oro en la Major League Baseball) durante el Clásico Mundial del 2006: “Parece un torpedero detrás del home”. Y como si el destino fuera sabio, Pestano le puso out en home al boricua en esa lid, imagen todavía inolvidable para ambos.
¿Más grande o más consagrado? ¿Mejor o más completo? ¿El receptor ideal? Todas esas preguntas no pretenden respuestas impuestas, aunque su nombre y sus palabras pudieran hacerlo.
DETRÁS DEL HOME, UN MÉDICO FUE EL MÁS INTEGRAL
Daniel Martínez Rodríguez, periodista de Radio Reloj
Es la pelota para los habitantes de este archipiélago como una buena metáfora de la vida, que por derecho propio se ha erigido en baluarte de innegable valía en la construcción de nuestra identidad. Si bien anda algo afiebrada, no ha perdido la capacidad que tiene para alimentarnos de pasión y debate.
Hoy intentaremos avivar las brasas de la polémica abordando un tema sobre el que todos creen acuñar la razón. ¿Quién es el mejor receptor en la historia del béisbol nacional?
Muchos, y con altas dosis de juicio, afirmarán que Ariel Pestano y Juan Castro se disputan ese formidable mérito; sin embargo, trataré de desafiar el filo de tamaños argumentos lanzando una tesis plagada de precipicios y vértigo.
Nuestro catcher más integral ha sido Pedro Medina Ayón, conocido también entre bolas y strikes como el médico. Para tratar de seducirlos, hurgamos en los tesoros del estadístico Yirsandy Rodríguez Hernández.
Es cierto que los números defensivos de Pestano son superiores a los de Pedro Medina y Juan Castro, y que a la ofensiva, aunque existe cierta paridad, el capitalino es superior en renglones de gran peso, a pesar de jugar cinco temporadas menos.
Además, es justo aclarar que durante buena parte de la trayectoria del villaclareño, jugada la mayoría con bate de madera, el nivel de juego decayó, lo cual marcó un declive arrastrado hasta la actualidad.
Pedro Medina y Juan Castro jugaron en una etapa donde estuvieron los mejores bateadores, jonroneros, robadores, así como grandes lanzadores de nuestra historia, lo que repercutió en contiendas más rigurosas, no obstante la utilización del controvertido bate de aluminio.
Se ha enraizado la teoría, con ciertas dosis de razón, de que el trabajo del catcher es atrapar a los jugadores en base, cuando en realidad debe influir más su ofensiva para apoyar el trabajo de su lanzador y su labor detrás del plato, para reducir las posibilidades de ataque del adversario.
Si usted voló sobre el recuerdo, centelleó en nostalgias, o encendió la mecha de la investigación, la presente tesis confirmó que la pelota y los debates que la escoltan, continúan siendo vital fuego que felizmente nos abrasa. ¿No lo cree?
EL MÁS ELEGANTE DE TODOS
Jorge Luis Coll Untoria, estudiante de Periodismo
Muchas veces se escucha que “las estadísticas son frías” en las discusiones sobre temas deportivos, sin embargo es difícil determinar esto. Pero no hay duda de que si un nombre se repite tanto es porque algún mérito debe tener.
Así sucede cuando los aficionados intentan determinar quién ha sido el mejor receptor que ha pasado por los clásicos nacionales. Un nombre sobresale una y otra vez: Juan Castro.
Sus actuaciones con el madero no llaman la atención y tal vez varias personas se pregunten cómo con un promedio de 228 en 16 series nacionales está calificado entre los principales máscaras de la historia de la pelota cubana.
La respuesta está en su accionar defensivo. Aunque hay catchers con números superiores, al parecer Juan Castro suplía las carencias en el bateo con su inigualable manejo de la mascota. En 16 temporadas tuvo un average con el guante de 985 y un porcentaje de cogidos robando de 46.8 (330 enfriados en la intermedia en 705 intentos de estafa).
La inteligencia era una de sus armas distinguidas y durante su carrera le recibió a uno de los cuerpos de pitcheo más brillantes que ha pasado por la pelota cubana. Rogelio García, Julio Romero, Reinaldo Costa y Omar Ajete, entre otros, en algún momento fueron guiados o aconsejados por él.
Nada de esto aparece en las anotaciones pero influye en el resultado de un partido, pues la receptoría no es considerada una posición ofensiva, y en un tiempo en el que el béisbol estaba lleno de toleteros no hacía falta un catcher tan bateador, sino alguien con la capacidad de guiar a sus compañeros y defender bien y, al parecer, defensa era el segundo apellido del pinareño.
Decidirse por el vueltabajero, Medina o Pestano parece una mera cuestión de gusto, de lo que decidan los miles de mánager que tenemos en nuestro país. No todos los argumentos están en los dígitos y si así fuera cómo explicaríamos el caso de Germán Mesa. Hay torpederos con cifras superiores; pero casi nadie cuestiona que ha sido el mejor shortstop que se ha visto en los terrenos cubanos.
Quizás lo mismo pasa con Juan Castro y lo que haya marcado a sus aficionados sea su elegancia detrás del home para fildear foulflys y su mascoteo al recibirles a los lanzadores. Lo cierto es que, independientemente de las estadísticas, los fanáticos siempre lo consideran entre los grandes y, muchas veces, el más grande.
Por mi corta edad no lo vi jugar, pero su designación la escuchaba en cada disputa. Entonces, para salir de dudas —cuando todavía estaba en la primaria— le pregunté a mi papá quién era Juan Castro y la respuesta llegó más rápido que una recta de 99 millas: “Un catcher pinareño, el más elegante de todos”.
Estadísticas: Yirsandy Rodríguez Hernández
SN: Series Nacionales Jugadas; HR: Jonrones; CI: Carreras Impulsadas; H: Hit; 2B: Dobles; 3B: Triples; CA: Carreras Anotadas; AVE: Average; PB: Passball; BR: Bases Robadas a la Defensa; CR: Cogidos Robando a la Defensa; CR-AVE: Average de Cogidos Robando.
Porque te contradices Daniel, si tu me dices esto......Es cierto que los números defensivos de Pestano son superiores a los de Pedro Medina y Juan Castro, y que a la ofensiva,.....Como puedes hacerno creer que Pedro medina fue el mas integral, si la evaluacion integral del pelotero se hace basada fundamentalmente en estos departamentos. Saludos Tabare
ResponderBorrarYo no lo vi jugar a no ser esporadicamente en el equipo Cuba como cuando Korea les arrebato la Olympiada de 2008, pero con esos numerous creo que Pestano se lleva el galardon. Hay que destacar que Pedro Medina se enfrento a un picheo de 1.5 mas calidad que Pestano y Juan Castro tambien. Juan Castro era un out por regla porque queria, la banda de Pinar del Rio y Vegueros era sumamente ponderosa y el bateo de el no hacia tanta falta. En lo emocional yo me quedo con Pedro Medina.
ResponderBorrar