La serie ahora favorece 5-2 a los dos elencos antillanos, los cuales, además han igualado dos encuentros. Foto: José Raúl Rodríguez |
Por Ray Otero.
Occidentales remontó marcador adverso con un racimo de seis carreras en la séptima entrada, para imponerse por marcador de 8-6 sobre su similar de los Diablos Rojos de México, en choque celebrado este miércoles en el horario de la tarde en el estadio Victoria de Girón de Matanzas, como parte de la serie amistosa Unidos por la Pasión, iniciada el pasado viernes y que culminará este jueves.
La serie ahora favorece 5-2 a los dos elencos antillanos, los cuales, además han igualado dos encuentros.
Este miércoles fueron los Diablos los que anotaron ventaja temprano ante el abridor derecho cubano Erlis Casanova, cuando en la parte alta de la tercera llenaron las bases y un roletazo de Luis A. García por la posición de tercera base, provocó error del antesalista Lázaro Hernández, que dejó entrar las dos primeras del encuentro. Acto seguido, Erlis permitió sencillo del cubano Henry Urrutia al izquierdo para volver a llenar las almohadillas, pero en duelo de pinareños, Casanova retiró a Alexei Ramírez por la vía del doble play, en la jugada anotando México la tercera.
Los visitantes marcaron otra en la cuarta ante Casanova, cuando volvieron a llenar las bases y con un out, Luis A. Cruz roleteó a la posición del segunda base, para el 4-0.
Mientras, el abridor derecho mexicano, Sergio Valenzuela, pese a llenar las bases en el primer inning, lograba colgar tres escones seguidos a la ofensiva cubana. En el cuarto, los nacionales colocaron dos hombres en bases por sencillo por el cuadro de Eduardo Blanco y el segundo boleto de Valenzuela en el juego, este sobre Yunior Ibarra, y el alto mando de los Diablos decidió aplicarle la grúa. Al final, el relevista Jesús Anguamea terminaría la amenaza, obligando a Yorbert Sánchez a batear para doble play. Valenzuela culminó su labor con 3 1/3 de innings, 4 hits, 5 ponches y 2 boletos, sin aceptar anotación alguna.
Casanova, que estuvo metido en apuros durante sus 4 1/3 de labor, iniciaría el quinto regalando boleto a Alexei Ramírez y, con un out, Emmanuel Ávila le sonó sencillo al centro para colocar hombres en las esquinas. Sería el último bateador enfrentado por el pinareño, quien rápidamente fue sustituido claramente no en su mejor apertura, pese a tampoco haber sido bien defendido.
En su relevo llegó el joven Yosver Zulueta, quien movió al corredor a segunda por wild pitch, y permitió la entrada de la quinta por rolata de David Vidal por la posición del segunda base y la sexta por el tercer error de la defensa cubana en el juego, este del intermedista Aníbal Medina.
A partir de ese momento, Zulueta se mantendría sin permitir más libertades, completando 3 2/3 en blanco, con 4 ponches propinados, a base del uso de su buena curva hacia abajo y su velocidad, que lo vio marcar hasta 94 mph. Por su trabajo Zulueta mereció el triunfo.
Y la entrada grande de Cuba, y que al final decidió el choque, resultó la séptima, inning en donde los de la isla vieron desfilar a 12 bateadores y en donde, con un out, Medina inició todo ante el relevista Gonzalo Sañudo, recibiendo boleto, Céspedes le siguió con doble al central, Cepeda recibió boleto para llenar las bases, Lázaro Hernández sonó doble al centro para remolcar las dos primeras, Norel González la dejó caer por la línea de la banda izquierda para apuntarse doble y colocar el juego 6-5, mientras después del segundo out en ponche sobre Blanco, el emergente Orlando Acebey trajo empate y ventaja, con doble al izquierdo que explotó al relevista Sañudo.
Cuando todos pedían al ex Grandes Ligas Jean Machi para frenar a Cuba, el alto mando mexicano trajo a Edgar López, quien llevó a Acebey a tercera por wild pitch y regaló boletos consecutivos al emergente Joasán Guillén y a Tartabull, solo para con otro wild pitch, aceptar la entrada de la octava de los nacionales.
Del noveno se encargaría el derecho Miguel Lahera, quien terminó retirando a tres de los bateadores enfrentados con un sencillo aceptado y un ponche, apuntándose el salvamento.
El relevista de los Diablos, Gonzalo Sañudo, responsable de cinco de las carreras de Cuba en el séptimo inning, resultó el perdedor.
Occidentales ahora jugará este jueves su último choque de la serie ante Guerreros de Oaxaca en el mismo parque Victoria de Girón a las 5:00 de la tarde, mientras los Diablos Rojos se verán las caras con Orientales, desde las 8:00 de la noche, en el estadio Latinoamericano de La Habana.
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