El habanero Yusniel Díaz comenzó la temporada con el Tulsa y batea para .295 con 57 hits, incluidos cinco cuadrangulares, cuatro triples y seis dobles, además de sumar siete bases robadas |
Por Jorge Ebro.
El Juego de las Estrellas del Futuro es la antesala del cielo de las Grandes Ligas. Si Yoan Moncada exhibió sus talentos en la cita de Miami en el 2017, ahora le toca a otros compatriotas suyos hacer lo mismo en la capital del país dentro de un par de semanas.
Por la mayor de las Antillas estarán presentes entre las mejores promesas del béisbol Yordan Alvavez (1B, Houston), Randy Arozarena (OF, San Luis), Yusniel Díaz (OF, Los Angeles) y Yoan López (P, Arizona).
Con estas selecciones, Cuba supera en una la cifra de prospectos en esta vitrina, pues en la edición anterior estuvieron presentes además de Moncada, Alvarez, y el matancero Yadier Alvarez de los Dodgers.
Alvarez, un espigado chico de Las Tunas, es el único que repite de la edición pasada y su reciente ascenso a Triple A indica su progresión dentro del sistema de los actuales campeones de la Serie Mundial.
Quien sabe si en un par de temporadas más Alvarez, quien posee una línea ofensiva de 325/389/615 con 13 dobles, 12 jonrones y 46 impulsadas, pueda disputarle el primer cojín al estelar Yulieski Gurriel en el roster de los Astros.
Arozarena estuvo muy cerca de integrar el equipo grande de los Cardenales y fue cortado en los días finales de la primavera, pero en las Menores ha seguido produciendo al ritmo de ocho palos de vuelta entera, 10 dobles, 33 remolcadas y 14 bases robadas. Existe un chance de que pueda ser subido en septiembre.
El habanero Díaz comenzó la temporada con el Tulsa y batea para .295 con 57 hits, incluidos cinco cuadrangulares, cuatro triples y seis dobles, además de sumar siete bases robadas.
Finalmente, López está demostrando su valía para la organización de los Dbacks al promediar 14.9 ponches por cada nueve entradas de actuación que le ha consolidado en su ascenso a la Doble A con seis juegos salvados.
Así como Moncada ya es una realidad de los Medias Blancas, quién sabe lo que suceda con estos cuatros chicos. Al menos su presencia en Washington indica a las claras que van bien encaminados.