Por Rodolfo Durán
Los sudamericanos vencieron a sus vecinos venezolanos para sumar su tercera victoria ante una sola derrota, ratificándose en el segundo lugar de la justa beisbolera.
Este resultado mantiene al seleccionado cubano, que aparece con record de 2-2, con posibilidades matemáticas de retener la corona, que ostenta de manera consecutiva desde la cita de Santiago de los Caballeros en 1986.
Los cubanos, que chocarán esta noche con el equipo de República Dominicana, están optando por un empate múltiple al final del torneo, que pudiera darse con Colombia, Puerto Rico y Panamá.
Los locales enfrentarán este jueves en horas de la tarde a los invictos boricuas (4-0), y un triunfo ante ellos los ascendería hasta el primer lugar de la competencia.
Por su parte, las remotas opciones de Cuba, se apoyan en ganar los tres juegos que le restan, el de esta noche a las nueve (hora de nuestro país), ante los quisqueyanos, mañana ante Nicaragua, y el partido final el próximo domingo ante los colombianos.
De ganar estos tres desafíos, los discípulos de Carlos Martí, terminarían con 5-2, y tendrían que esperar por un empate doble con Colombia, o hasta cuádruple con puertorriqueños y canaleros.
El equipo cubano, dependerá de hoy de su estelar derecho Lázaro Blanco, y necesitará que sus bateadores produzcan más, pues solo han anotado ocho carreras en cuatro juegos, cinco de ellas en el partido inaugural.
A falta de cuatro fechas para el final, ya quedaron eliminados al oro, los planteles de Venezuela (2-3), Dominicana (2-3), Nicaragua (1-3) y México (1-4).
Este jueves la séptima jornada la abrirán a las once de la mañana, Panamá (3-2) ante los nicas.